CATRIEL (ACA).- Habrían robado una retroexcavadora en la zona rural cercana a Casa de Piedra, a la vez que nuevamente una iglesia fue víctima de un robo y es el segundo caso en los últimos 20 días, aunque antes sufrió otros hechos similares. Ayer a la madrugada le robaron una computadora y una impresora.

En tanto en otro lugar -según trascendió- se habrían llevado una retroexcavadora de un sector rural adonde operan empresas petroleras. Hace poco, allí mismo se robaron un camión con un costoso equipo de soldadura del que aún no se sabe nada.

Ayer a la mañana se supo que una iglesia evangélica ubicada a escasos metros del barrio "Isla de los Estados", conocido popularmente como las "400 viviendas" fue nuevamente el lugar elegido por los ladrones. Según Rubén Yunes, pastor de esa congregación religiosa, el robo habría sucedido en la madrugada de ayer. Los malvivientes no rompieron ninguna abertura para ingresar a un cuarto que oficiaba de oficina de la entidad, sino que lo hicieron por los techos y aparentemente sin dejar rastros se fueron del lugar con la computadora y una impresora. Yunes, dijo también que hace unos 20 días le robaron un costoso proyector sin que se haya esclarecido ese hecho.

Por otra parte, otro caso mucho más llamativo se conoció también ayer aunque habría sucedido durante el fin de semana. Según trascendió, en la zona rural cercana al lago Casa de Piedra, habrían robado una retroexcavadora. En ese sector, en la propiedad de la familia Ñanculeo, operan empresas relacionadas con la actividad hidrocarburífera y hace aproximadamente tres meses se produjo un hecho similar que aún no habría sido esclarecido. En esa oportunidad se llevaron un camión cargado con un costoso equipo de soldadura. Se sospechaba de gente que pudiera tener perfecto conocimiento del lugar y del movimiento del lugar, aunque también se sospecha de la participación de gente que pudiera trabajar allí, ya que en ese momento, el camión debió pasara varias tranqueras con candado, y lo hicieron sin romper ninguno.

Tanto en el complejo habitacional como en la zona rural, existe el mismo reclamo: mayor seguridad. En la zona rural, la presencia policial es nula, mientras que en las 400 viviendas los vecinos se quejan que el lugar es "tierra de nadie", por la cantidad de hechos que suceden, como el incendio de una moto en la puerta de un funcionarios municipal o la venta de droga en sitios determinados.