NEUQUÉN (AN).- Algunos autoparques ubicados sobre las calles Primeros Pobladores e Independencia son los más denunciados por estafa. En su mayoría son atendidos por gitanos que se ganan la confianza del comprador que se queda sin nada luego de entregar parte del valor del vehículo que quería comprar.

La información fue proporcionada por la Policía y los gitanos, consultados a partir de este dato oficial, admiten que entre sus pare existen "nuevas generaciones que han perdido los códigos".

Desde la División de Delitos Económicos de la Policía neuquina, el comisario Oscar Longo, informó que por mes reciben unas 20 denuncias por estafas que se cometen en estos autoparques. Asegura que lideran el ranking interno de investigaciones.

También dijo que por semana, en esas dos arterias, se realizan entre cuatro y cinco allanamientos en no más de siete lugares.

El 90 por ciento de los damnificados llega a la policía luego de reclamar sin éxito la entrega del automóvil o la devolución de la seña.

En todas las denuncias hay factores comunes que dejan entrever cuál es el accionar de estos seudos vendedores.

Según la información policial, la mayoría de las ventas las tratan de hacer los días viernes a partir del mediodía y los fines de semana ya que el interesado, tentado por una

buena oferta, no tiene demasiadas posibilidades de comprobar los datos del vehículo en el registro o en la Dirección de Sustracción de Automotores, porque se encuentran cerrados.

Hábiles con la palabra

De las denuncias presentadas en la Policía se desprende que los vendedores son hábiles con la palabra y ganan rápidamente la confianza del interesado.

El precio de venta ayuda mucho, pero se destaca la facilidad con la que parecen desprenderse del vehículo ofreciendo ir a dar una vuelta, y hasta ofrecen rebajas cuando el comprador no lo espera.

Algunas de las víctimas no piden ningún documento que avale el pago efectuado y ese descuido complica más el reclamo.

Una vez entregada la seña, para dilatar la entrega, los gitanos utilizan distintas excusas que buscan cansar a la persona para que no vuelva más y de todo por perdido.

Excusas

"'Venite otro día porque no me llegaron los papeles del lugar donde está registrado'. Otras veces aducen que le falleció un familiar por lo cual no han podido completar el trámite. También suele salir una gitana a decir que la persona que se busca enfermó por lo que ha tenido que viajar a Buenos Aires. Hemos llegado a recibir denuncias de gente que ha esperado varios meses para llegar a un arreglo con el gitano por lo que al no tener respuesta viene a denunciarlo", detalló a "Río Negro" el comisario Longo.