NEUQUÉN (AN).- Sin las grandes aglomeraciones de otros años, pero sí en buen número y distribuidos en distintos espacios al aire libre, los jóvenes y las familias disfrutaron de los más de 20 grados que se promediaron ayer en el inicio de la primavera neuquina.
Los lugares de concentración fueron la Plaza de las Banderas, los balnearios sobre el río Limay, y el centro de la ciudad, este último con un renovado uso a partir de las obras realizadas en el Parque Central de la ciudad.
El Parque Norte y la Plaza de las Banderas tuvieron el brillo que ya es costumbre, sin importar la época del año, en la zona de bardas de la ciudad. Es que el espacio se ha convertido en un lugar de encuentro por excelencia en las tardes de los fines de semana, cuando las familias comparten un mate y los deportistas salen a correr al aire libre. El balneario Río Grande fue otro de los lugares elegidos, aunque no en la dimensión de años anteriores. Su sitio lo tomó la ruta de acceso hasta el lugar, el bulevar de calle Olascoaga. Allí fueron a compartir la tarde, con reposeras de por medio, quienes además del sol buscaban el verde del pasto y algo de sombra. Es que los 23 grados de temperatura que se registraron a las 17 no alcanzaron para que fueran muchos los que eligieran broncearse a la orilla del río.
El Parque Central fue, en las inmediaciones del cenotafio a los caídos en Malvinas, una de las sorpresas como punto de encuentro, ya que fue la alternativa para los que prefirieron el centro de la ciudad. Según se confirmó pasadas las 20, el día en que confluye el inicio de la primavera y los festejos de los estudiantes pasó sin incidentes de importancia.
