CHOELE CHOEL (AVM).- Como un golpe bajo, pero con la fuerza y entereza con la que siempre peleó por llegar a la verdad en cuanto a la muerte de su hijo Juan Pablo, Emilce Pinazo sintió la noticia que, muy a su pesar, esperaba: el sobreseimiento para el ex intendente Jesús Zuain por el hecho que le costó la vida al joven en la madrugada del 11 de enero de 2002.

"El martes pasado me enteré del sobreseimiento y realmente me sentí consternada como todos aquellos buenos amigos que me llamaron para respaldarme, en realidad esto es un final anunciado, ya el año pasado el juez Gatti pidió el procesamiento de Zuain y el abogado defensor Oscar Pandolfi lo apeló ante la Cámara II del Crimen y después de varios meses le dictaminaron la falta de mérito donde dos jueces resolvieron que Zuain no era responsable en la muerte de Juan Pablo y el restante se abstuvo", dijo Emilce Pinazo.

"Después de la falta de mérito no habrían demasiadas pruebas o peritajes técnicos para presentar y todavía no decidí cómo voy a continuar con todo esto, ya que todo lo que presenté fue desestimado, estaba esperándolo aunque a uno se le mueve toda la estantería y esto me vuelve a confirmar que la justicia es un juego que se adapta a quien más le conviene", aseveró.

Juan Pablo tenía entonces 21 años y volvía a su casa luego de compartir un asado con sus amigos, dado que regresaba a Buenos Aires para continuar con sus estudios.

Cerca de las 6 de la mañana, Juan Pablo pasaba junto a dos amigos por el bulevar de la calle San martín donde el municipio choelense había instalado una estructura metálica con luces simulando ser un pino de navidad. El joven, impensadamente, tocó la estructura y la descarga eléctrica lo fulminó, a pesar de los desesperados intentos de sus amigos por salvarlo de la trampa mortal. En brazos, llegó al hospital pero ya había muerto.

Las primeras pericias dieron como resultado que los cables -al aire y atados en la estructura- no eran los adecuados. La justicia responsabilizó por entonces a Zuain por ser intendente. Se instruyó una causa penal -iniciada como "Accidente Fatal"- que fue cambiando de carátula, como así también de responsables por lo sucedido. En medio, un par de juicios a distintos empleados municipales, la instrucción y el disyuntor que se perdió en un viaje a Viedma donde iba a ser peritado.

"Lo que quedaría por hacer es ir a la Suprema Corte de Justicia y si no fuera favorable seguir a la Corte internacional de los Derechos Humanos pero para eso debe haber voluntad y ganas, cosa que hoy no estoy muy dispuesta a hacer porque no quiero que la justicia me siga triturando", culminó Emilce Pinazo.