MADRID.- El gobierno español aprobó ayer un plan de retorno voluntario al que los inmigrantes podrán acogerse a partir de "finales de octubre, primeros de noviembre", aunque siguen las dudas sobre la aceptación que tendrá tras las críticas de algunas asociaciones de inmigrantes.
El programa aprobado en Consejo de Ministros "tiene carácter voluntario y se podrán acoger a él aquellos ciudadanas o ciudadanos que lo deseen o que crean que les puede beneficiar", afirmó Corbacho en la rueda de prensa.
El ministro precisó que los inmigrantes que pueden acogerse a este plan han de "ser extracomunitarios y pertenecer a un país de origen que a su vez tenga convenio con la Seguridad Social española". La vicepresidenta del gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, recordó que se trata de un plan y "un derecho al que se pueden acoger los trabajadores de los 19 países con los que España tiene ya suscritos convenios bilaterales en materia de Seguridad Social". (DPA)