VIEDMA (AV)-La reformulación del estatuto de la Universidad Nacional del Comahue fue el eje central de la primera de las cinco reuniones dispuestas con esta intención por el Consejo Superior de esta casa de altos estudios para normalizar la situación institucional con el llamado a elecciones. El próximo encuentro será el 10 de octubre en Bariloche y los tres restantes en Neuquén.
En la tarde de ayer el vicegobernador de Río Negro, Bautista Mendioroz, recibió a los integrantes del Consejo Superior.
Previo al debate que comenzó ayer aquí en Viedma el Centro Regional Zona Atlántica de la Universidad Nacional del Comahue manifestó a los integrantes de la máxima conducción de la universidad algunas inquietudes no sólo sobre la posición en relación a la reforma del Estatuto sino al funcionamiento de este centro.
El debate por la reforma está pendiente desde la frustrada asamblea del 2003.
El Consejo Superior presidido por la rectora, Teresa Vega, está integrado por cinco representantes de los profesores, igual número de estudiantes, de no docentes, de graduados, los nueve decanos y los directores de las escuelas de Medicina; Salud y Ambiente y de Idiomas.
Lo central es el estatuto
El decano del CURZA, Miguel Silva, consideró que tras la reforma del estatuto se dará un proceso electoral para la elección del nuevo rector que estimó podría darse en el 2010, pero estimó que "lo central es la reforma que tanto han reclamado algunos sectores y que desencadenó la crisis institucional.
Vamos en buen camino pero se necesita mucho diálogo, consenso". Destacó coincidencia en la conducción universitaria en el sentido que el objetivo central debe ser la movilización y la participación de la gente, teniendo en cuenta la cogobernabilidad de la universidad que suma unos 1.700 profesores casi 800 no docentes, 24.000 alumnos y aproximadamente 4.000 graduados.
Consultado sobre si la creación de la Universidad Nacional de Río Negro generará una mayor atención de la UNC al centro regional, Silva estimó que la institución "tendrá que rever la situación" sobre todo su relación con los centros regionales como el de Viedma y Bariloche, planteo que ambos decanos han formulado.
"Esto implica una reformulación de la política de la universidad como institución", sostuvo al destacar que ese fue el planteo del CURZA formulado ayer al Consejo Superior además de la necesidad de replantear algunos lineamientos políticos, académicos, administrativos y nuevos roles de los centros regionales. "Ser tenidos más en cuenta y considerados, así como corregir algunas asimetrías que han sufrido los centros regionales, como el presupuesto no sólo de funcionamiento sino para atender las necesidades docentes, infraestructura, es decir, una atención más similar a la que tienen algunas unidades cercanas al rectorado que es producto de un largo devenir en el que se han sumado postergaciones", puntualizó Silva.
