CIPOLLETTI (AC).- El acto por el noveno aniversario del crimen de Ana Zerdán reunió ayer a amigos de la bioquímica y familiares del dolor en la plaza San Martín. Fueron pocos minutos, pero cargados de críticas.
"Hace un año terminaba mi recordatorio del aniversario de nuestra querida Ana diciendo: una sociedad sin justicia no puede tener paz. Queremos verdad y justicia. Esperamos el próximo aniversario de la muerte de nuestra querida amiga poder decir se hizo justicia, Anita descansa en paz", empezó diciendo Graciela Edorna, referente del grupo de amigas.
"En un nuevo aniversario de su brutal asesinato debo decir que me equivoqué -siguió leyendo-. Compré espejitos de colores. Creí en la justicia pero me doy cuenta que no es justa ni independiente", agregó.
Los cuestionamientos siguieron. Apuntaron hacia las autoridades provinciales que "defienden lo indefendible de sus funcionarios incorrectos", hacia diputados y concejales que "se olvidaron" que Zerdán fue su correligionaria; y también hacia el Colegio de Bioquímicos. A ellos, por su ausencia, por no haber acompañado en el juicio.
Además hubo reproches porque tras la lectura de la sentencia "todos los policías que actuaron en la investigación y fueron citados a declarar, fueron trasladados".
"¿Casualidad o causalidad?", se preguntó Edorna durante el acto.