Me dirijo a usted con el objeto de manifestar públicamente mi más profundo dolor por la situación que produjo en mi hogar la recepción de la cédula de notificación referente al arrendamiento vencido de los restos de mi señor abuelo.

La ordenanza Nº 10.407, que regula el plazo para mantener los restos de un familiar en el cementerio, reglamentada en el 2008, nos da un plazo de 3 días para decidir qué hacer con los restos.

Al respecto debo decir que desde hace 30 años se viene cumplimentando con el pago riguroso del canon exigido, que ningún decreto, ley, ordenanza o reglamentación debe ser retroactiva y más cuando se lesionan derechos legítimamente adquiridos en tiempo y forma. Que independientemente de la discusión que necesariamente plantea el tema, no se puede adoptar una decisión en tres días, en contra de nuestra voluntad y por una decisión compulsiva y torpe de no sé quiénes.

Tan torpe e irrespetuosa como el trato que le dieron a mi señora madre cuando fue al cementerio local a consultar sobre la cuestión. Me adhiero a la solicitada del Dr. Zingoni y sostengo que no debemos permitir que esta gente nos pise la historia, así nomás como así. Nuestros mayores, aunque muchos de ellos anónimos, también forman parte de la historia que algún día será escrita en el Neuquén.

Respetarlos es respetar la historia.

María Esther Sandoval, DNI 16.651.065

Neuquén