Miércoles 17 de Septiembre de 2008 Edicion impresa pag. 40 > Policiales y Judiciales
Una familia maniatada y amedrentada
Fue en Neuquén. Les llevaron 80 pesos y gastaron 170 en cerrajero

NEUQUÉN (AN).- Una familia recibió la "visita" de los delincuentes que se llevaron un botín inferior al monto que tuvieron que gastar en cerrajería las víctimas. La Policía tardó casi una hora en llegar al domicilio y se la tuvo que llamar en dos ocasiones.

Una familia de Bahía Blanca que reside en calle Cultrum al 1100 y que está a cargo de una distribuidora de alimento de mascotas, tuvo una noche signada por el daño de los delincuentes y la impericia policial. "Golpearon a las 21.30 con la excusa de que buscaban a la familia Gómez. Mi marido les dijo que se habían equivocado y ahí forzaron la puerta y se metieron", recuerda todavía con angustia la mujer.

La joven madre se encontraba bañando a su hijo de 4 años, por lo que al escuchar los gritos de los malvivientes llamó a su hijo de 10 y también lo metió en el baño. "Yo les dije que se llevaran todo lo que quisieran pero que no nos hicieran nada", recordó la mujer.

Uno de los delincuentes, el más grande de unos 35 años, se encargó de registrar la vivienda mientras el más joven de unos 19 años, le apuntaba con una pistola al dueño de casa reclamándole la plata de la distribuidora. Los delincuentes habrán estado unos 20 minutos hurgando en cada rincón de la humilde vivienda sin hallar nada. "Si les pasaron un dato, no sé, se habrán equivocado porque nosotros somos personas muy humildes y de trabajo", confió la joven.

Para no irse con las manos vacías, los delincuentes se llevaron una amoladora y una maquina de agujerear, además de 80 pesos que tenía el hombre en su billetera y las llaves de la camioneta de la familia. En la huida los malvivientes ataron al hombre y los dejaron encerrados con llave en la casa. De inmediato la mujer llamó de su celular a la policía, pero como a los 20 minutos no venía nadie comenzaron a gritar hasta que un vecino la escuchó y tras auxiliarlos llamó de nuevo a la policía que llegó a los 50 minutos del primer llamado de emergencia.

"En cerrajero nos gastamos unos 170 pesos porque nos quedamos sin llave de casa y de la camioneta", confió la víctima de este asalto que le costó más caro a la familia por el daño ocasionado que por las cosas que le llevaron.

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