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Flavors dice que Piccinini pudo haber adulterado pruebas | ||
Afirma que tergiversó el informe del INAL | ||
La empresa Flavors, cuestionada por la comida preelaborada que entrega para los planes sociales del gobierno rionegrino, acusó a la defensora del Pueblo de haber "modificado maliciosamente" muestras enviadas para el análisis del Instituto Nacional de Alimentos del Ministerio de Salud de Nación, con presuntos restos de tierra y pelos de ratas. El informe del INAL fue difundido el viernes por Ana Piccinini, a quien Flavors acusó de haber "violado los procedimientos de toma de muestras de nuestros productos, ha cortado y modificado maliciosamente el informe que da cuenta de los resultados del análisis y, lo que es peor, pudo haber favorecido la adulteración del producto analizado, saboteando la muestra e incorporándole pelos de rata y tierra". Tras señalar que sólo las autoridades sanitarias pueden realizar ese tipo de inspecciones, afirma que la defensora del Pueblo "tomó ella misma sus propias muestras presuntamente de nuestros productos y las llevó en su bolso al laboratorio para su análisis, sin dejar constancia de su actuación en los términos establecidos por las normas vigentes", y enumera los requisitos fijados para esos procedimientos. Indica que "con el propósito de mentir acerca de los resultados de las muestras de nuestros productos, la defensora del Pueblo no hizo público el informe original del INAL -que realizó estos análisis-, sino que lo tergiversó y lo recortó, cambiando su redacción, seleccionando sólo algunos párrafos y, peor aún, agregando textos que son de su autoría como si fuera parte del informe original. Por ejemplo, agregó a su informe un dibujo de una rata, haciéndolo pasar como parte del informe del INAL". Dice que "la defensora del Pueblo también mintió acerca de otro de los productos que envió para su análisis al INAL. En efecto, ella declaró que recibió de manos de un beneficiario del programa Comer en Familia el paquete de 175 grs de salsa de estofado que envió para su análisis, cuando en realidad sólo se pro duce y se distribuye para el programa de comedores escolares. Este tema no es menor, por cuanto en este producto se habría detectado la presencia de pelos de rata y tierra". "Esta última muestra fue maliciosa y burdamente alterada. El informe del INAL -no el que ella comunica, que de manera engañosa hace pasar por el original- sostiene que si el producto se encontrara contaminado con pelos de rata o ratón y tierra, no podría bajo ningún aspecto arrojar resultados correctos en lo que a microbiología respecta", afirma. Además, el informe del INAL "que la defensora del Pueblo escondió y modificó y reemplazó por el texto por ella preparado haciéndolo pasar por el original, alertó que el paquete de salsa de estofado que trajo la Sra. Piccinini bajo su brazo, en el que habrían aparecido pelos de rata y tierra se encontraba, en realidad, muy deteriorado y en malas condiciones, a tal punto que concluye que el resultado correspondiente a la muestra no permite arribar a conclusiones respecto del estado del resto del lote, por tratarse de una muestra aislada presentada por la Defensora en forma personal y sin cumplimentar los procedimientos legales que se utilizan para tomar muestras seguras para su análisis". "En la misma oportunidad la defensora del Pueblo intentó presentar al INAL para su análisis productos vencidos (....) maniobra que fue advertida a tiempo y rechazada por el INAL, quien no admitió la muestra para su análisis", afirma. Tras otras consideraciones acerca de la actuación de Piccinini en el caso, dice que "cuando la defensora del Pueblo fue intimada legalmente por la falsedad de sus acusaciones, ella prefirió ocultarse detrás de sus fueros. Le solicitamos que ahora enfrente a la justicia como corresponde". | ||
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