NEUQUÉN (AN).- El Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) colocará 2.000 nuevos medidores de consumo de agua potable antes de fin de año en comercios, industrias y la zona céntrica de la ciudad de Neuquén. Desde el organismo se reconoció que la intención es extender la medición a los 70.000 usuarios que tienen en la ciudad en los próximos tres años.

La instalación de estos controladores estará atada a una reestructuración del cuadro tarifario del organismo, que podría llevar a que una casa tipo pague hasta 100 pesos por mes.

Las precisiones fueron brindadas por el presidente del EPAS, Nelson Damiani, quien indicó que "en noviembre vamos a comenzar a colocar 2.000 medidores de consumo en la zona céntrica, los comercios y las industrias". El funcionario explicó que "estamos armando un pliego para la semana entrante para poder pedir la partida para llegar a toda la ciudad, comenzando por el sector centro, comercial e industrial con el doble de medidores que hay hoy".

Damiani señaló que actualmente en Neuquén funcionan cerca de 2.000 medidores de los cuales prácticamente la mitad se encuentran en los barrios Alta Barda, Salud Pública, 14 de Octubre, Copol y Mercantiles, en tanto que el resto están distribuidos por la ciudad.

La iniciativa ya fue comunicada al municipio, dado que

desde el EPAS se busca que desde el área de planeamiento municipal se exija que las nuevas viviendas a construir cuenten con una reserva de espacio para la colocación de estos medidores tal como se realiza con los servicios de electricidad y gas.

"La idea es colocar micromedición no sólo para cobrar, sino para ver dónde se está gastando, si hay pérdidas, y dónde se consume más y por qué", argumentó el funcionario y aseguró que "no se puede seguir haciendo demagogia con el agua, hay que medirla y cobrarla porque si no, lo que es gratis se tira".

Es por esto que Damiani indicó que la colocación de los medidores trae aparejado un nuevo sistema tarifario, en el que mientras se plantea crear zonas y usuarios exentos, también se establecerán fuertes incrementos de pre

cios y la creación de bandas de consumo similares a las utilizadas en los servicios de gas y electricidad.

Damiani precisó que "muy pronto mandaremos un proyecto de decreto para que se modifique el plan tarifario" y agregó que "estamos trabajando con el gobernador -Jorge Sapag- y la ministra de Hacienda -Esther Ruiz- en este nuevo plan, apuntando especialmente a los sectores pudientes".

La advertencia se debe a que mientras desde el organismo se busca eximir del pago a las familias que se señalen desde el ministerio de Desarrollo Social -excepción actualmente vedada-, también se busca recaer con mayor fuerza en los sectores de mayor consumo como son las viviendas que poseen piscinas. "Estamos atacando el tema a través de ver fotos satelitales para obligar a los usuarios que tienen piletas a poner medidores", precisó Damiani.

El titular del EPAS explicó que "salvo la suba de este año que fue por decreto la tarifa no se modificaba desde 1992, cuando una familia tipo pagaba lo mismo que costaba la televisión por cable. Hoy una familia tipo paga 24 pesos y el cable cuesta 100 pesos".

Y agregó que "para que el EPAS pueda pagar con su recaudación el sueldo de los empleados, el consumo eléctrico, insumos y horas extra, una familia tipo tendría que pagar eso".