Los miembros del Club de París analizarán hoy la propuesta argentina para cancelar su deuda con un significativo número de países que conforman el grupo, aunque el monto planteado no convence a los acreedores, quienes reclaman hasta 7.900 millones de dólares.
El gobierno de Cristina Fernández de Kirchner estima que sus compromisos con este organismo ascienden a 6.700 millones de dólares, cifra que es ubica muy por debajo de lo que pretende un listado de países integrado por Alemania, Estados Unidos, España, Holanda, Italia y Japón (quienes suman el 87 por ciento de la deuda total con el organismo).
La reunión de hoy del Club de París, integrado por un total de 19 países, estaba programada desde antes del anuncio realizado por la jefa del Estado argentino para cancelar la deuda que entró en default desde el 2002.
Este grupo funciona como un foro informal de acreedores oficiales y países deudores, y cuenta entre sus principales funciones la de coordinar mecanismos de pago y renegociación de deudas externas asumidas entre países y/o instituciones financieras.
Su creación se concretó en 1956, cuando Argentina estuvo de acuerdo en efectuar un encuentro con sus acreedores públicos.
De este tipo de programas ya han participado países como Brasil, Israel, Kuwait, México, Portugal, Nueva Zelanda y Turquía, entre otros.
Pese a ser un grupo informal -cuyo presidente es siempre un alto funcionario de la Tesorería de Francia, Xavier Musca- entre sus principios figura la
toma de decisiones caso por caso, y de acuerdo a la situación que presente el país deudor.
Según el gobierno argentino, el monto adeudado ronda los 6.700 millones de dólares, cifra que será tema de análisis en la reunión que mañana mantendrán los integrantes del Club de País en su encuentro en la capital francesa.
El pasado 2 de setiembre, Fernández de Kirchner realizó un sorpresivo anuncio en un acto por el Día de la Industria en el Salón Blanco de la Casa Rosada, donde anticipó el pago de la deuda con las reservas del Banco Central.
El titular del organismo, Xavier Musca, ya dejó en claro que la cifra en cuestión asciende a 7.900 millones de dólares, al incluir los intereses al capital impago tras la devaluación.
En los últimos días, Hernán Lorenzino, secretario de Finanzas, destacó que actualmente la Argentina y el Club de París "está en proceso de conciliar los datos" para determinar la deuda que debe pagar la Argentina.
Al respecto, Musca expresó oportunamente que la decisión argentina de cancelar su deuda es "una buena decisión" e indicó además que la estrategia planteada por la Argentina se presenta como "un nueva comienzo" que tendrá por objeto "normalizar" la relación suspendida desde el 2002.
La reunión de mañana de la directiva del Club de París servirá para trabajar en la definición de modalidades que permitan el reembolso de los compromisos impagos por parte de la Argentina. (DyN)