| "La primera vez que escuché una guitarra eléctrica, encontré un sonido que me fascinó. No sé, tiene un timbre, una característica que no posee ningún otro instrumento. Después de estar mucho tiempo dedicándome a tocar, a investigar... En verdad, aprendí solo, no tuve maestros y en ella encontré el canal de expresión que necesitaba y necesito. El sonido está en el corazón, dentro de cada uno. Lo que uno debe intentar es ser fiel a esa sonoridad. Con la práctica se llega a ese lugar, los dedos y el corazón -en un momento- pasan a ser uno. Después de mucho tiempo de trabajo, parecen una misma cosa la cabeza, el corazón, las manos y la guitarra funcionan juntos, laten juntos." | |