VIEDMA(AV).- Hoy es el último día de la tercera Feria de Ciencia y Tecnología Zonal Valle Inferior que se desarrolla en el Centro Municipal de Cultura y que reúne proyectos de siete escuelas de Viedma.

Cuenta con diversos stand en donde alumnos de escuelas secundarias y primarias exponen sus inventos e investigaciones. Evaluados por un jurado de docentes especializados, los niños competirán por un lugar en el siguiente nivel de la feria, que es provincial.

Entre el conocimiento científico y la investigación, los chicos pudieron mostrar sin embargo, su lado solidario. Esto se vio reflejado en varios de los proyectos.

Cristina Lamas, Rocío Bayer, Lucira Chazarreta y Ramiro Alvin tienen entre doce y trece años. Representan a la Escuela Nº 297, donde cursan séptimo grado. "Estamos presentando una mesa adaptada para la buena postura. En la escuela tenemos una nena que tiene problemas de visión y sufre dolores musculares en la espalda porque se inclina mucho sobre el banco. De ahí surgió la idea de hacer una mesa que se adapte a ella", explicaron los pequeños solidarios. Del proyecto participó todo el grado. Entre otra de las historias que trajo esta Feria, no faltó la solidaridad con la comunidad y el bienestar general.

Nicolás Macía tiene dieciséis años y Gonzalo Baldomé diecisiete. Asisten a cuarto y quinto año, respectivamente, de CEM Nº 22 de Guardia Mitre. Junto con sus compañeros presentaron un proyecto para llevar a una instancia de potabilización más aceptable, el agua de su ciudad. "Tiene exceso de manganeso y cloro", dijeron los chicos. Por esta razón, hicieron un prototipo de un sistema que puede ser utilizado en un tanque normal, para reducir los índices de manganeso.

La ecología con miras a la producción y el desarrollo de cultivos más sanos, no faltó en este encuentro de la mano de alumnos de una escuela agraria.

Este es el caso de Nicolás Clobertand, de 18 años, y de su compañero, Gonzalo García, de 17 años. Pertenecen al cuarto año de la Escuela Agraria CEM Nº 69, y junto con otros dos compañeros presentaron un proyecto para aprovechar el monte, sacando las ramas cortas, para fabricar un herbicida natural.

Como dato significativo para esta edición de la Feria de Ciencia y Tecnología, se vio una clara merma en la participación de colegios y la afluencia de público.

Con una afluencia que superó las dos mil visitas, la Feria anterior contó con 22 puestos.