JUNÍN DE LOS ANDES (ASM).- En una fría noche de agosto del 2007, decenas de personas vivieron una pesadilla, en medio de un solitario paraje dominado por el río y la vista del colosal volcán Lanín. Un año después, esos hombres y mujeres vivieron el mejor de los sueños, ese donde se concretan los anhelos. Desde ayer, el Centro de Educación Integral San Ignacio volvió de las cenizas, renovado, moderno y, sobre todo, solidario.

Y fue una fiesta, de la que participaron el gobernador Jorge Sapag y el embajador de Estados Unidos, Earl Wayne (ver recuadro), la subsecretaria provincial de Educación, Patricia Ruiz; el intendente Campos; el director gerente de Chevron para Latinoamérica, Wes Lohec; el presidente de Chevron Argentina, Ian Partridge; el presidente de la Fundación Cruzada Patagónica, Diego Baudo y los directivos de esa institución.

Merced a la alianza de la Fundación Cruzada Patagónica y Chevron, que ya colaboraba antes del siniestro con el programa "una escuela, una granja", se hizo posible la reconstrucción del edificio. El incendio se había llevado 1.000 metros cuadrados de aulas y albergue; la biblioteca, la cocina, los laboratorios y otras dependencias.

Con un aporte de 2.500.000 pesos, que colocaron a la reconstrucción del CEI como la mayor inversión social de Chevron en Argentina, y otros recursos solventados por otras instituciones y el propio gobierno provincial, se reinauguraron 1.300 metros cuadrados de construcción moderna, que sigue los estándares más rígidos en materia de seguridad, con las mismas exigencias que la petrolera impone en sus emprendimientos.

Las nuevas instalaciones cuentan con aulas, sector administrativo y espacios de uso común. El área pedagógica cuenta con una biblioteca y nueve aulas destinadas a laboratorio, ciencias naturales, plástica, música, ciencias sociales, multimedia, informática, matemática y lengua.

Pero es sólo una parte del trabajo, porque para el 10 de octubre próximo está prevista la reapertura de otra moderna ala, consistente en comedores y albergue, y que fue construida con aportes de otras instituciones. A su vez, la provincia entregó ayer una parte de un subsidio de 500.000 pesos y el gobernador firmó un convenio de asistencia.

El CEI San Ignacio y la Cruzada Patagónica reúnen 25 años de trayectoria en educación agro-técnica gratuita a alumnos pertenecientes a comunidades rurales de la provincia del Neuquén y Río Negro. Más de 210 jóvenes en situación de riesgo reciben educación a diario, a la vez que más de 70 adultos reciben educación en sus hogares.

El predio está ubicado en el Valle de Sancabao, a orillas del río Chimehuín.