CHOELE CHOEL (AVM).- Trabajando, pero sin pista firme y con más dudas que certeza. Así era la situación ayer con respecto al robo cometido en la madrugada del lunes en la joyería "Euzkadi", ubicada en Avellaneda 685 de esta localidad, hecho que se repite y cuando aún perdura el sinsabor por lo sufrido -casi en forma idéntica- en agosto del año pasado; aquella vez, por un valor muy superior a los cien mil pesos.
En aquella ocasión los ladrones violentaron una reja de la parte trasera del comercio, desconectaron el sistema de alarma, ingresaron y se llevaron alhajas y relojes, aunque no pudieron abrir la caja fuerte. Según la policía, en esa oportunidad habrían actuado al menos cinco personas porque debieron correr de lugar la pesada caja y no ser vistos desde afuera de la joyería.
Si bien los dueños y la policía han sido muy cautos a la hora de precisar información con respecto al botín obtenido en el nuevo atraco, se especula que sería una cifra bastante cercana a la de hace trece meses.
Lo mismo ocurre con el procedimiento realizado. Se repitió el lugar de ingreso -es decir, los fondos- usaron una amoladora para cortar chapas y mampostería, inutilizaron el sistema de alarma mediante el rociado de espuma de poliuretano en aerosol -que no se comercializa en la región- y se llevaron lo más preciado de las estanterías, aunque esta vez sí pudieron abrir la caja fuerte y cargar con joyas de gran valor y dinero en efectivo.
Ayer a la mañana, fuentes cercanas a la policía, negaban la versión de la apertura de la caja. También durante toda la jornada, hubo un policía de custodia frente al local debido a que no se habían tapado los boquetes por los que ingresaron.
El Gabinete de Criminalística secuestró todas las herramientas utilizadas por los cacos.