Pese a los elevados precios y a que todavía faltan tres meses, los fanáticos de Madonna agotaron anteayer en apenas tres horas las entradas para su concierto en River Plate. Cientos de jóvenes pasaron la noche a la intemperie frente al estadio para asegurarse un lugar en el show del 6 de diciembre, que forma parte de su gira mundial "Sticky & Sweet Tour". Así, se agregó una nueva función para el 7 de diciembre.