ZAPALA (AZ).-Familiares y vecinos de la pequeña Siomara Calfinahuel, quien fue encontrada muerta la semana pasada en esta localidad, se reunieron ayer en la plaza de los Próceres reclamando el esclarecimiento del hecho.

Allegados a la familia Calfinahuel reiteraron sus dudas con respecto a la teoría de la justicia y la policía, que sostiene que la nena llegó por sus propios medios a la meseta y allí fue atacada por la jauría que le dio muerte.

"Tenemos muchas dudas, para nosotros alguien llevó a Siomara hasta la parte más alta de la meseta porque sola no pudo haber subido jamás" reconoció ayer una voz cercana al entorno de los Calfinahuel. La misma fuente dejó entrever que entre los propios familiares de la chiquita se manejan varias opiniones pero que esperan un dictamen final de la justicia. "Es posible, como dice la autopsia, que no haya sido abusada pero eso no quita que alguien la condujera hacia ese lugar y como no pudo lograr su objetivo finalmente la asesinó" agregó otro.

Entre los pesquisas que trabajan en el caso se maneja otra información. Si bien todavía resta conocer el resultado final de las pericias realizadas al cuerpo de Siomara y al contenido intestinal de los canes presuntamente involucrados en el hecho, la hipótesis más firme sigue siendo la del ataque de la jauría.

"Hasta ahora ningún testigo pudo desvirtuar la versión de los vecinos que aseguran haber visto a la nena jugando sola al pie de la barda" advirtió uno de los investigadores.

Por su parte el fiscal Marcelo Jofré reiteró que hasta el momento ninguna persona se presentó de manera espontánea para declarar en la causa.

"Nos manejamos con certezas, si alguien vio otra cosa que lo aporte en fiscalía, de lo contrario seguiremos esperando el resultado de los análisis que estarán dentro de diez días" agregó Jofré. El fiscal aseguró que más allá del informe forense que reveló que la niña murió por un shock hipovolémico producto de las heridas que le causaron los perros, se están efectuando otro tipo de pericias. Reveló que se estudiará si debajo de las uñas de Siomara quedaron restos de piel humana lo cual podría volcar la investigación hacia otro rumbo.

La criatura fue encontrada sin vida el miércoles de la semana pasada poco antes del mediodía en una meseta a unos 300 metros de su casa, ubicada sobre Avenida del Maestro y Misiones.

La abuela, María Mardonez, contó que la pequeña había salido a jugar a la vereda y que la dejó sola unos minutos para preparar el mate. Cuando la mujer salió de la casa, Siomara había desaparecido. La búsqueda concluyó unas horas después cuando una patrulla descubrió el cuerpo destrozado por el accionar de los canes.