Da la impresión de que el Concejo Deliberante viene en los últimos tiempos iluminando con señales de una lucha contundente en la actual etapa histórica de la ciudad.

La consigna es atender puntos concretos de debilidad en que está inmersa la sociedad a través de promover el diálogo incansable y el intercambio. Favorecer si se quiere la cooperación y la solidaridad.

El radicalismo es mayoritario contando con seis ediles. No puede hacer lo que le plazca por el solo hecho de que hay matices de quebranto en el seno íntimo.

Los seis no piensan por igual. No obstante, se pueden mostrar todos juntos cuando haya que levantar la mano para iniciativas de carácter neurálgicas cuando el Poder Ejecutivo municipal requiera de esos votos. En pocos días se viene la discusión presupuestaria.

La oposición tiene apenas tres bancas. Dos le pertenecen al Frente para la Victoria una tercera para el ARI.

Sin imitaciones, todos han logrado convivir y tener consensos mínimos.

Del diálogo incansable surgieron ejemplos inéditos en los últimos días.

La creación de la red de municipios saludables viene permitiendo que el recinto deliberativo se transforme en una confluencia de instituciones de la comunidad preocupadas por la calidad de vida de los habitantes.

De este mismo lugar, surgió la mortificación comunal respecto de que la ciudad perdió -por razones presupuestarias de Aguas Rionegrinas- la planta de tratamiento de líquidos cloacales. Todavía no se logró que se pueda volver a poner en marcha con todos los riesgos sanitarios que ello implica.

Los concejales lograron que por lo menos en el ámbito de su jurisdicción, las modelos publicitarias reúnan un índice de masa corporal que no llegue a niveles anoréxicos.

Se vislumbran esfuerzos diferentes como pregonar para que en los kioscos escolares se desaliente el consumo de productos nocivos, regular el horario de cierre de locales nocturnos a fin de minimizar los riesgos en la diversión, atender el requerimiento de los jóvenes frente al alcohol o bien apuntarle a las bebidas energizantes y en eso ya hay un proyecto dando vueltas a fin de promover su prohibición de venta en locales nocturnos o estaciones de servicio.

Incluso, un diputado nacional -Jorge Cejas (FpV)- fue convocado a exponer sobre diversos proyectos institucionales que son materia de incertidumbre como el flojo servicio con que Aerolíneas Argentinas cubre la capital rionegrina y el controvertido tema de movilidad jubilatoria.

Es muy probable que estemos ante el nacimiento de otro tipo de conciencia o un mayor grado de sensibilidad social.

Las medidas correctivas están en los papeles, y aparecieron con ayuda de redes sociales articuladas por quienes sueñan y apuestan a utopías. Los miembros de la red de adolescencia del Hospital Zatti u otras organizaciones intermedias vienen logrando una gran familiaridad con todo el espectro político representado en el Concejo.

Más allá del esfuerzo, es necesario revertir las fallas de la sociedad en su vida cotidiana. Para eso habrá que fortalecer las prácticas de otro tipo de conductas convocando a más actores comunitarios.

ENRIQUE CAMINO

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