ROCA (AR).- En la posición que adoptaron los dirigentes de la Federación de Clínicas de Río Negro (Feclir), no hay demasiado margen de tiempo. Ayer, luego de una reunión realizada en Roca, solicitaron al titular del PAMI, César Di Pascual, una reunión para evaluar la situación financiera entre las dos entidades, pero de no obtener respuestas comenzarán mañana mismo con el corte de servicios a los afiliados de esa obra social.
Así lo anunció el presidente de la entidad, Salvador Scafidi, luego del encuentro con representantes de centros privados de Roca, Cipolletti, Cincos Saltos y Allen.
Todos acordaron solicitar un encuentro con carácter de "urgente" a Di Pascual, a quien le pedirán una revisión de los costos de las prestaciones, ya que resulta "incomprensible" -según el médico- que se sigan manteniendo los mismos valores que en 2007.
"Durante la anterior gestión llegamos a un acuerdo en que los valores se actualizarían al mismo ritmo que los de la obra social provincial (Ipross). Pero cuando asumió la nueva conducción se desconoció todo este acuerdo", dijo Scafidi y rápidamente advirtió que en caso de no ser recibidos, mañana mismo comenzarán con los cortes de servicios a los jubilados.
Otro de los frentes de conflicto que mantiene Feclir es con los dirigentes sindicales de ATSA, la entidad que agrupa a los trabajadores de clínicas y sanatorios, quienes amenazaron con paralizar los centros asistenciales si no se cumplía con el pago del 15 por ciento de aumento en los salarios del mes de agosto.
"No hemos tenido diálogo con el gremio pero estamos hablando con nuestro empleados para informarles que si hay medidas lo único que corre riesgo es la fuente de trabajo ya que hay muchas clínicas que tuvieron que despedir trabajadores", concluyó.