NEUQUÉN (AN) - Unos 200 empleados del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) marcharon ayer a la Casa de Gobierno y reclamaron el pago de bonificaciones salariales, en una protesta organizada por el gremio ATE.
Fue cerca del mediodía y la movilización coincidió con un paro de 24 horas que el sindicato planteó para esa empresa pública.
El secretario general de la organización, Ernesto Contreras, informó que ayer se entrevistó con el presidente de la empresa, Néstor Damiani, quien "nos dijo que le pediría una solución al ministro (de Gobierno, Educación y Cultura) Jorge Tobares".
Contreras dijo que la falta de pago de las bonificaciones implica un incumplimiento del convenio colectivo que elaboró el EPAS durante el año pasado.
Acerca del paro aseguró que implicó una retención de servicios en las cuadrillas operativas que realizan el mantenimiento en la capital provincial.
No descartó que hoy pueda llegar a suceder lo mismo, si es que no reciben una respuesta desde la Gobernación.
Según el gremialista, la aplicación del monto que reclaman supondría una suba del 3% en los salarios de los empleados. Aclaró que se trata de una cifra que sólo reciben quienes realizan tareas de reparación, precisamente por las características propias de trabajar en la calle.
Al margen de este planteo puntual, ATE le reclamó una negociación al gobierno de Jorge Sapag la semana pasada. Quiere una negociación para discutir que el sueldo más bajo ascienda a 1.800 pesos en el ámbito público.
