La victoria a domicilio ante Chile cambió radicalmente el panorama de Brasil, que mañana recibirá a la colista Bolivia. Así, de un plumazo, el equipo de Dunga escaló del sexto puesto al segundo en la carrera sudamericana hacia Sudáfrica 2010.
El contundente 3-0 propinado al conjunto de Marcelo Bielsa en Santiago le permitió al cuestionado DT brasileño taparle la boca a sus críticos. Dunga quedó en el ojo de la tormenta cuando el seleccionado Sub23 sólo pudo conseguir la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing, donde perdió en semifinales ante Argentina y siguió sin conquistar el único título importante que les falta.
La victoria del domingo ante la 'roja', mitigó el disgusto generalizado con el desempeño de la 'verdeamarela' en las eliminatorias, y ahora los jugadores piden que la hinchada los apoye ante Bolivia mañana en Rio de Janeiro, una plaza habitualmente poco amigable hacia el combinado nacional.
"Cuanto mayor sea el apoyo de la tribuna mejor será el desempeño de la selección", dijo Dunga, que recuperó la estabilidad en su cargo. Ayer, el entrenador se desahogó apenas pisó Rio: "Espero que los hinchas se comporten como lo hicieron los chilenos, que alentaron sin pausa al equipo".
