VIEDMA (AV).- Una nueva alternativa económica se instaló en esta capital y pretende repercutir favorablemente en los valles Inferior y Medio y en sus zonas de influencia. Una planta de reprensado de alfalfa y forrajes para exportación fue inaugurada oficialmente ayer al mediodía en el parque industrial, en instalaciones de lo que alguna vez fue una recordada fábrica tomatera.
La firma de capitales españoles "Alfalfa y Forrajes de la Patagonia" comenzó a operar esta semana en un galpón alquilado donde se concentrará la producción de alfalfa que adquiera la empresa a distintos proveedores de la zona.
Allí, los rollos que llegan desde los campos, se desatan y se reprensan para ser transformados en cubos para su posterior estibaje en contenedores secos para ser embarcados.
José María Osés, presidente del grupo empresario inversor, y Abel Lambea, presidente y director de "Alfalfa y forrajes de la Patagonia" informaron que la actividad del grupo se inició hace 60 años.
"Ahora surgió la necesidad de ampliar los mercados para producir forrajes y exportarlos. Indistintamente vamos a producir y adquirir, aunque por el momento estamos adquiriendo de colaboradores de aquí, como la empresa Quequén -ubicada en el Idevi, en cercanías de San Javier-, y otros del Valle Medio e Inferior", explicaron.
Las exportaciones se harán en contenedores secos desde San Antonio Este y Bahía Blanca. Los destinos son Japón, Corea, Emiratos Árabes y centro de Europa.
Los empresarios informaron que la inversión inicial es de unos 3 millones de euros y que el proyecto para ampliar en los tres o cuatro siguientes años alcanzaría los 10 millones.
Sólo buena calidad
Osés afirmó que en principio no tienen campos propios "pero a través de colaboradores estamos principalmente arrendando y comprando directamente la alfalfa a proveedores, potenciando que se siembre con las cualidades en dosis de semilla y nivelación adecuadas para sacar una buena calidad de forraje y buen rendimiento por hectárea".
Se sabe que en principio será todo para exportación. El trabajo en la planta que demandará la incorporación de cuatro o cinco personas ini
cialmente y luego a unas 10, consiste en la recepción de los rollos, que son reprensados en un gran recipiente en el que se le imprime una presión de 50 kilos por cm2.
"Alcanzamos un fardo de 1 metro por 80 cm. y 2.20 me
tros, de unos 750 kilos cada uno con el objeto de aprovechar el volumen del contenedor para que lleve el peso máximo posible y abaratar los costos de fletes", explicaron.
Todavía no se puede confirmar con qué frecuencia se exportará, pero pretenden hacer "contingentes de 50 o 100 contenedores y con la periodicidad que se nos marque desde las navieras. Se guardará la producción en el mismo galpón alquilado en el parque industrial", indicaron.
En enero pasado, la firma estuvo en contacto con los referentes de Patagonia Norte, operadora de los puertos de SAE y Bahía Blanca.
"Si hay volumen suficiente se trabaja todo el año, en principio 4 o 5 personas para esta temporada y cuando se aumente la superficie sembrada serán unas 10 personas", agregaron.