Más de medio millón de personas estaban siendo evacuadas o puestas a resguardo este domingo en las regiones orientales de Cuba ante la inminente llegada del "peligrosísimo" huracán "Ike", que podría atravesar gran parte de la isla tan sólo ocho días después de que "Gustav" arrasara el occidente del país.
Desde las 09:00 (13:00 GMT), las provincias de Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma, Holguín, Las Tunas y Camagüey se encuentran en "alarma ciclónica", la más alta y que implica la llegada inminente del huracán, avisó el Estado Mayor de la Defensa Civil.
En estas regiones se deben "concluir las medidas de protección correspondientes a un huracán de gran intensidad", subrayó la nota oficial, que también llamó a "priorizar la protección de personas en edificaciones seguras, regular el movimiento innecesario, mantener permanentemente informada a la población y proteger los recursos económicos y los bienes de la economía familiar".
Se espera que el ojo del huracán "Ike", con categoría cuatro, toque territorio cubano por las inmediaciones de Punta Lucrecia, en Holguín, entre las 22:00 y 23:00 (02:00-03:00 GMT) de hoy. A las 12:00 (16:00 GMT), el fenómeno meteorológico, que los medios de comunicación no se cansan de advertir de que es "peligrosísimo", se encontraba a 205 kilómetros del punto de impacto cubano, con vientos sostenidos de 215 kilómetros por hora, dijo el director del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología (INSMET), José Rubiera, que calificó el fenómeno meteorológico de "terrible".
Las más centrales provincias de Ciego de Avila, Villa Clara, Sancti Spíritus, Cienfuegos y Matanzas se encuentran entretanto ya en "alerta ciclónica", mientras que la provincia y la Ciudad de La Habana están en "fase informativa", en vista de que los pronósticos de evolución de "Ike" indican que el huracán podría atravesar prácticamente todo el territorio cubano en los próximos días.
Bajo la premisa dictada por las más altas autoridades de la isla de que la prioridad es "preservar vidas humanas", más de medio millón de personas estaban siendo evacuadas este domingo de las principales zonas de riesgo hacia albergues o viviendas seguras, así como de los principales balnearios turísticos afectados, según medios locales.
Camagüey inició desde temprano la evacuación de más de 224.000 personas, entre ellas 221 turistas extranjeros que fueron trasladados desde sus hoteles en la playa de Santa Lucía a otros del interior. En Santiago de Cuba estaba prevista la evacuación o reubicación de unas 150.000 personas, mientras que en Holguín se decretó la evacuación de más de 108.000 y en Guantánamo por el momento están siendo evacuadas 16.000, cifra que podría aumentar hasta las 35.000, de acuerdo con agencias locales.
Aunque la provincia de Matanzas todavía no se encuentra en la fase más elevada de alerta por "Ike", también estaba prevista la evacuación de unas 120.000 personas. Además, las autoridades matanceras realizan "trabajos" para "proteger" a más de 13.000 turistas extranjeros y nacionales alojados en hoteles del principal polo turístico del país, Varadero, indicó la agencia Prensa Latina.
Una de las principales preocupaciones de las autoridades y expertos cubanos es la "baja percepción de riesgo" que podrían tener los habitantes de las provincias más amenazadas, debido al hecho de que "nunca" en la historia de los huracanes las provincias orientales, salvo Granma, se habían visto azotadas por un huracán de categoría cuatro, señaló el meteorólogo jefe Rubiera.
También el diario "Juventud Rebelde" advertía en una información de portada titulada "Ike: peligro real e inminente" del peligro de que los habitantes orientales no tuvieran una percepción real de la amenaza del poderoso huracán.
Hay que tener "plena conciencia" de lo que eso significa, subrayó Rubiera, quien también destacó el hecho de que tampoco "nunca" en la historia ciclónica cubana se habían registrado dos huracanes que azotaran de manera tan seguida la isla, en ocho días, y mucho menos de una categoría cuatro, como está siendo el caso.
El huracán "Ike" se aproxima a Cuba apenas una semana después de que el occidente de la isla se viera azotado por otro ciclón de categoría cuatro, "Gustav", que aunque no provocó pérdidas humanas arrasó las regiones de Pinar del Río e Isla de la Juventud, dejando pérdidas "millonarias".
Más de 100.000 viviendas quedaron parcial o totalmente dañadas en esas regiones, así como las infraestructuras eléctrica y de comunicaciones, además de la grave afectación de numerosos cultivos.
Fuente: DPA