LONDRES (DPA).- Después del sapo crucificado en Italia, ahora es un Jesucristo con una erección el que causa indignación entre cristianos en el Reino Unido.
Un museo británico que expuso la obra del artista asiático Terence Koh deberá responder ante la Justicia por atentar contra la moral y las buenas costumbres. Además de Jesucristo, la instalación "Gone, Yet Still" expuesta en el Centro Báltico de Arte Contemporáneo en Gateshea también incluía al ratón Mickey y a ET con erecciones. La cristiana Emily Mapfuwa se sintió herida en sus sentimientos religiosos e inició medidas legales. La mujer de 40 años añadió que el museo no se habría atrevido a exhibir a Mahoma de esa manera. Un portavoz del museo confirmó que se presentó una demanda por lo civil. La pena máxima por el delito es de seis meses de cárcel y 5.000 libras de multa.
El centro de asesoramiento legal a cristianos Christian Legal Centre, que apoya la demanda, aseguró que la escultura "no tenía otro objetivo que ofender a los cristianos y calumniar a Cristo". El Centro Báltico ya fue noticia en el pasado en varias ocasiones por exposiciones controvertidas.