La comunidad educativa de la Escuela Laboral y Especial 2 continúan esperando una respuesta para retornar al dictado de clases. El colegio compartía en uno de sus techos parte del depósito de un mayorista de pinturas. Se iniciaron gestiones pero sólo para reacondicionar el lugar.
La subsecretaría de Infraestructura y Planificación informó que "se comenzaron las actuaciones administrativas" para cambiar un cielorraso altamente inflamable, de unos 260 metros cuadrados de superficie.
Todavía no se piensa en mudar de destino el establecimiento, que funciona en un edificio alquilado, en la calle Perticone al 1.551, por lo que los chicos volverán a clases junto a la distribuidora de pinturas. No se sabe, tampoco, cuando estarán terminadas las refacciones.
Hace dos meses, luego de una inspección de Bomberos, las clases en la escuela fueron suspendidas.
En una nota que le enviaron al Consejo, los docentes y padres le informan que "en el techo del colegio se almacena gran cantidad de latas de pintura".
"El otro riesgo grande son las salidas de emergencia. Son muy difíciles de abrir", dijo la directora Nilda Ríos en una recorrida por el establecimiento.
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Fuente: Agencia Neuquén.
