Las viudas de las tres víctimas de la masacre de General Rodríguez llegaron hoy a los tribunales de Campana, ya que el juez que investiga a un cartel mexicano que operaba en la zona quiere interrogarlas sobre los teléfonos que utilizaban ellas y sus maridos.
Fuentes vinculadas a la causa informaron a Télam que la intención del juez Federal de Campana, Federico Faggionatto Márquez, es preguntarles a las mujeres sobre los números de teléfonos Nextel y celulares que tienen a su nombre y si eran utilizados por ellas o sus maridos.
Es que en la causa se busca documentar si existieron contactos fluidos entre al menos una de las víctimas del triple crimen y la banda de narcotraficantes. Esta diligencia es previa a la ampliación de la declaración indagatoria que aparentemente el juez tiene previsto tomarle mañana al detenido Marcelo Tarcia, la cabeza argentina de la banda mexicana, dijeron las fuentes.
La primera en llegar fue Mariela, esposa de Ferrón, quien arribó a las 10 acompañada por un hombre mayor y se negó a hablar con la prensa. Minutos después arribó Bellone a bordo de un auto, con el que le permitieron ingresar directamente al playón de los tribunales situados en 25 de Mayo al 400, de Campana.
La última en llegar fue Verónica, la mujer de Leopoldo Bina, quien lo hizo acompañada por un hermano, con quien entró caminando y sin hacer declaraciones al edificio judicial. Las mujeres se hallaban acompañadas por su abogado, Miguel Angel Pierri, quien además planea reunirse con el juez de la causa para plantearle la posición de las querellas, que vincula al triple crimen con el cartel mexicano responsable de un laboratorio de metanfetaminas descubierto en Ingeniero Maschwitz el 17 de julio pasado.
En lo que va de la causa que lleva adelante el juez Faggionatto Márquez se determinaron comunicaciones entre Tarcia y uno de los líderes mexicanos del cartel, Jesús Espinoza, actualmente prófugo, con "Sebastián F.", por Forza.
Por tal motivo, el juez necesita documentar en el expediente si los teléfonos empleados por Forza estaban a su nombre o el de su esposa y a su vez saber cuáles eran los que empleaban las mujeres de las tres víctimas, para poder eventualmente establecer otros vínculos y entrecruzamiento de llamadas.
La causa que investiga Faggionatto Márquez se inició el 17 de julio pasado, cuando la policía allanó una casaquinta de Maschwit y descubrió un laboratorio de metanfetaminas, 20 kilos de efedrina -precursor para la elaboración de drogas sintéticas- y detuvo a 10 personas, 9 mexicanas y una argentina.
Casi un mes después, el 14 de agosto último, Forza, Ferrón y Bina fueron encontrados asesinados a tiros en General Rodríguez, tras permanecer una semana desaparecidos y ahora se investiga si hubo vinculaciones en ambos hechos.