NEUQUÉN (AN).- A nueve meses de la puesta en vigencia de la ordenanza que prohibió fumar en espacios cerrados de acceso público, los registros municipales demostraron que de las 18 actas de infracción labradas por violar esta disposición la mitad se efectuaron en un sólo boliche y casi el 90% en locales bailables.

A pesar de que el promedio de multas es de dos por mes, desde las distribuidoras de cigarrillos de la ciudad se aseguró que sus ventas no disminuyeron sino que hubo modificaciones en cuanto a los lugares de mayor demanda.

La ordenanza 10.866 comenzó a regir el 15 de noviembre pasado, pero su punto de inflexión fue cuatro meses más tarde cuando la llegada de los primeros fríos alentó a varios fumadores a ignorar la prohibición. De acuerdo a los registros de la dirección municipal de Comercio a los que este medio pudo acceder, hasta la fecha son 18 las actas de infracción labradas por violar esta normativa.

De ese total las planillas indican que la mitad fueron labradas en la bailanta El Mega, en tanto que otro boliche y dos pubs acumulan en conjunto seis infracciones, y sitúan al rubro de los locales bailables de alta concentración nocturna como los espacios donde más se infringe la normativa.

Prácticamente la totalidad de las multas labradas por los inspectores se dieron por medio de operativos de control nocturno, salvo una realizada de oficio a una céntrica confitería, la cual cuenta con un amplio sector especialmente acondicionado para fu

madores.

Entre los comercios infraccionados también se encuentra el centro de convenciones neuquino, el Espacio Duam, en donde en una jornada en la que se realizó una fiesta dance, los agentes comunales no sólo hallaron gente fumando, sino también bebidas en envase de vidrio a la venta.

Pese a que el promedio de infracciones es de dos por meses, desde la distribuidoras de cigarrillos de la ciudad se aseguró que no hubo una reducción en sus ventas. "Los primeros días se sintió una leve baja, pero después el mercado volvió a acomodarse y se ha mantenido estable", aseguró Martín Muñoz, el supervisor de ventas de la firma Cimar SRL.

El referente de este sector comercial advirtió que "lo que hubo fue un cambio en la ubicación de la mayor demanda porque a la caída de lugares de alta venta como el casino o los quioscos cercanos a los pubs o boliches, se incrementó mucho la venta en los barrios".

Este cambio fue ratificado por varios quiosqueros del microcentro que aseguran que en sus locales la venta de cigarrillos se redujo en aproximadamente un 40%.