NUEVA YORK (DPA) - Tuvieron que pasar diez años e interminables horas de investigación para que la esperada y ambiciosa producción del director Steven Soderbergh sobre el "Che" Guevara fuera una realidad.
Con el actor puertorriqueño Benicio del Toro dando vida al histórico héroe de la revolución cubana famoso por su lema "Patria o muerte", la primera de las dos películas de Soderbergh sobre el Che, "El argentino", celebrará su estreno mundial el 5 de setiembre.
"Para abordar un proyecto cinematográfico como éste hay que estar un poco loco", decía Soderbergh en una reciente entrevista en el diario "El País".
Y es que llevar a cabo la producción de la vida del "Che" no fue fácil para el realizador de cintas tan reconocidas como "Traffic".
Una película que le valió el Oscar al mejor director y que supuso el reconocimento internacional de Benicio del Toro, que gracias a su interpretación en esta película sobre el narcotráfico se llevó la estatuilla dorada al mejor actor secundario.
El proyecto sobre el "Che", impulsado por Soderbergh y Del Toro, necesitó de un largo y minucioso proceso de investigación con el objetivo de crear una película lo más fiel posible a la realidad.
El equipo de producción dedicó parte de la búsqueda a viajar a Cuba, Bolivia, París y Miami, con la intención de contactar con las personas que pudieran dar sus diferentes visiones sobre el personaje del "Che".
Gran parte de la película se basa en las memorias de Ernesto Guevara, mientras que también se documenta en los archivos desclasificados de la CIA sobre la muerte del líder revolucionario, ejecutado en Bolivia el 9 de octubre de 1967.
En definitiva, la preparación del filme implicó lidiar con una montaña de documentación y provocó, ante la amplia información obtenida y para no dejar la historia del "Che" sesgada, que se decidieran hacer dos películas en vez de una.
Así, la primera en estrenarse, "El argentino", abarca el inicio de la revolución cubana y su triunfo.
La cinta empieza con el encuentro del "Che" con Fidel Castro en México y donde se gesta la Revolución, y acaba en 1959, con la
victoria de Castro y el Che sobre el dictador cubano Fulgencio Batista.
En esta parte, rodada principalmente en España y también en Nueva York, se podrá ver cómo Guevara pasa de ser médico a convertirse en un combatiente y acabar siendo ministro del gobierno de Castro.
La segunda cinta, "Guerrilla", arranca en 1965 con la renuncia política del "Che" en el gobierno cubano para unirse a la guerrilla boliviana, y acaba con su muerte.
La interpretación que hace Del Toro le valió la Palma de Oro en la última edición del Festival de Cannes, donde se presentaron ambas cintas.
Para Del Toro, que también se implicó en la película debutando como productor, llevar a cabo este papel era "arriesgado" porque no era hablar sólo del personaje sino de un país.
Por su parte, en la presentación en Cannes, Steven Soderbergh comentaba que la idea era hacer que la gente sepa algo más del "Che" más allá de ser un icono dibujado en camisetas y gorras.
"La idea de la película era responder a la pregunta: ¿Se puede dar historia a una camiseta?", comentó el director, que añadió: "La respuesta no la tendremos hasta que la película se estrene. Así lo espero, pues hay mucho más que una camiseta". "La gente conoce el nombre y conoce la imagen, pero no conocen la historia".
En su obsesión por ser lo más fiel posible a la realidad, la película está básicamente rodada en español, ya que el realizador quiso que se contara en su idioma real.
Un español que suena en varios acentos gracias a la diversidad de los actores que participan en el film, como el mexicano Demián Bichir, que da vida a Fidel Castro; el cubano Jorge Perugorría, o los españoles Unax Ugalde y Elvira Mínguez.
"No creo que se pueda hacer esta película con credibilidad alguna si no es en español. Confío en que finalmente hayamos llegado al momento en que cada película que se hace en una cultura fuera del país, se haga en el idioma de esa cultura". "Ya no puedo ver una película sobre un país donde la gente hable otro idioma", sentenció Soderbergh, cuya cinta del "Che" por fin ve la luz, cuarenta años después de la muerte del legendario personaje.