La intervención de Viarse en la licitación del tramo Los Menucos-Maquinchao de la ruta 23 le saldrá bastante cara al erario público nacional.

El mero rol de intermediario entre Vialidad Nacional y la empresa que efectivamente realizará la obra básica previa a la pavimentación de los 72 kilómetros dejará en las arcas de la empresa del Estado rionegrino al menos 7 millones de pesos.

El costo del "pasamanos" fue admitido esta semana por las propias autoridades de Viarse. Y se consolidó allí una enorme contradicción con lo que habían dicho ellos mismos antes de que "Río Negro" revelara de qué manera se habían incrementado -sin licitación- las ganancias de la firma Juan Felipe Gancedo SA, a cargo de la obra sobre el camino que atraviesa la Línea Sur.

Cabe recordar que Viarse aparece a cargo de la obra, a pesar de no tener recursos para realizarla. Por eso tuvo que subcontratar los trabajos, con un trámite que se inició por un monto de 39 millones de pesos en diciembre del 2005 y se amplió a 91 millones un año después.

El gerente económico financiero de Viarse, Luis Felipe Suárez, recibió a "Río Negro" a mediados de esta semana. Dijo haber estado enfermo y que se levantó de la cama ante la insistencia de este medio de obtener copias de los dictámenes de la Fiscalía de Estado y de la Contaduría General acerca del engorroso expediente.

Durante una hora de diálogo, Suárez confirmó y defendió el "ahorro financiero" que lograron con esta obra sobre la ruta 23.

"A fines del 2006 presentamos todos los cómputos nuevos a Gerencia de Vialidad Nacional de acuerdo al proyecto y preguntamos cómo nos iban a dar la adenda para seguir la obra. Nos dijeron que nos aprobaban hasta Aguada de Guerra. Nos actualizaron los valores y nos dijeron que teníamos un crédito presupuestario y financiero de 52 millones de pesos", explicó Suárez.

Y aquí surge la maniobra de la que el gerente de Viarse se enorgullece. "Yo tengo con Gancedo una obra contratada de Los Menucos a Maquinchao. Lo primero que hago se la ofrezco a ellos mismos pero a valores históricos del contrato del 2005", agregó. Entonces, sin licitación, de manera directa le adjudicaron los trabajos para finalizar lo iniciado, pero con un incremento que en lugar de significar 52 millones llegará a 44 millones.

Suárez lo justifica. "Si yo licito, por supuesto que tengo que licitar a los valores que me dio Vialidad Nacional. ¿Y quién se queda con la guita? Los contratistas. ¿Y yo qué hago? Miro el techo. Conclusión de todo esto, firmo un contrato por 44 millones de pesos más, que suma 79 millones", sostuvo.

"Vamos a tener un ahorro financiero de 12 millones de pesos de los cuales tengo ya 4 millones. Si yo hubiera hecho como se hace comúnmente, me dejo de ganar esta guita que es mía. ¿Por qué Viarse no se va a hacer de un beneficio de ahorro financiero si en definitiva los valores que a mí me dio Vialidad Nacional no tengo por qué transmitirselos a Gancedo?", agregó.

"Yo hablé con Contaduría y Fiscalía de Estado y me prestaron conformidad. Y Gancedo estuvo de acuerdo en mantener los valores del 2005 porque tenían todo el equipamiento y personal en el mismo lugar", cerró.

De esta manera, Suárez brindó una versión totalmente opuesta a la que había dado pocas semanas atrás el gerente de Obra, Marcelo Molini: "En este caso se licitó casi por el mismo monto que involucra el convenio que firmamos con Vialidad Nacional. En otras obras siempre en el "pasamanos" licitábamos en un valor un poco más bajo, lo que nos dejaba un porcentaje ínfimo que aseguraba el tema de administración y todo eso. Sin embargo ahora prácticamente todo lo que nos da Vialidad Nacional lo volcamos en la obra, por no negociar frente a una lucha de larga data como la Ruta 23. Serán unos 500.000 pesos menos", había dicho el ingeniero.

Suárez calculó la ganancia de Viarse en 12 millones de pesos, pero luego de una consulta telefónica -y como para agregar más confusión al complejo panorama- Molini reconoció que hubo un error en las cuentas y que en realidad el beneficio final rondará los 7,3 millones.

De una forma u otra, surgen numerosas incógnitas. ¿Por qué Vialidad Nacional no licitó directamente los trabajos? ¿Sabe el gobierno nacional que la empresa del Estado rionegrino se queda con al menos 7 millones del presupuesto?

Cabe recordar que la licitación de este tramo de la Ruta 23 está en la mira del fiscal nacional de Investigaciones Administrativas, Manuel Garrido. Seguramente en las palabras de los directivos habrá nuevos elementos para orientar el destino de esa causa.

PEDRO CARAM

pcaram@rionegro.com.ar

HUGO ALONSO

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