CIPOLLETTI (AC).- "En modo alguno puede evaluarse como un deceso accidental ni de ocurrencia en el lugar. El deceso de la menor se ha debido producir con anterioridad a su ubicación dentro de las aguas del canal", enfatizó ayer la jueza María del Carmen García García respecto del caso Otoño Uriarte. Su presunción, en base a una serie de características del cuerpo y pericias técnicas realizadas, es que los restos de la adolescente fueron arrojados al cauce del canal "muy poco tiempo antes del corte del agua".
"Sino no podrían haber sido ubicados en el lugar donde estaban", estimó ayer en una entrevista en LU19.
A Ricardo Néstor Cau, Ángel Germán Antilaf, José Iram Jhaffri y Maximiliano Manuel Lagos, la jueza los procesó y les dictó la prisión preventiva por encubrimiento agravado. Cree que participaron del ocultamiento del cuerpo, que lo habrían enterrado, desenterrado y arrojado a las aguas del canal donde apareció el 24 de abril de 2007, seis meses después de la denuncia de desaparición. Ese año el agua del canal se cortó apenas unos días antes del hallazgo.
García García tuvo muy en cuenta las pericias realizadas a un nailon, que "tenía nudos y evidenciaban una manipulación humana de resguardo o cerramiento". Este elemento fue encontrado por la comisión investigadora en adyacencias de un desagüe, no muy lejos del sitio donde aparecieron los restos.
En marzo el nailon arrojó los primeros datos positivos al tribunal: a través de pericias odorológicas (fuertemente criticadas por la defensa) se advirtió "el olor de la víctima y de los sospechados". Previo a los procesamientos, la jueza sumó un "respaldo probatorio científico" relacionado con este elemento.
"Analizado en el banco nacional de datos genéticos de Buenos Aires, del material genético que se pudo descifrar, se pudo determinar que hay indicios de la cadena genética tanto de la menor como de al menos dos personas de sexo masculino. Eso ha sido evaluado como otro elemento de gran importancia para la resolución", reveló García García.
No mencionó en ningún momento de la entrevista la denuncia que pesa en su contra ante del Consejo de la Magistratura por presunto mal desempeño en este caso, pero sí defendió la investigación realizada. Dijo que "ha tenido seriedad, entidad y alta profesionalidad" y que si bien se llegó a una resolución, continúa.
"Esto seguirá siendo trabajado en la medida en que deban ser esclarecidos ciertos puntos que aún son materia de alta preocupación, tales como las circunstancias claras, precisas de ocurrencia del deceso, el lugar, el modo, las circunstancias preliminares al acontecimiento muerte. Hoy por hoy se encuentran pendientes pericias de importancia, tales como de extracción", mencionó.
Habló también de por qué advierte como "altamente probable" la existencia de una privación ilegítima de la libertad de la menor, una sospecha que aún mantiene hacia algunos de los imputados.
A tres de los detenidos los indagó por la este delito pero les dictó la falta de mérito.