ST. PAUL, Minnesota, EE. UU. (AP).- El Partido Republicano iniciará mañana su convención nacional para nominar a John Sidney McCain III candidato a la presidencia, pero más allá de la formalidad, la ocasión será de contraste extremo de sus protagonistas.
McCain, de 72 años, pronunciará el jueves su discurso de aceptación a la semana siguiente que lo hiciera en Denver su rival del Partido Demócrata, Barack Hussein Obama, de 47. A partir de allí, la campaña electoral entrará con toda fuerza en su tramo final hasta las elecciones del 4 de noviembre. En los cuatro días de actividades desfilarán por el podio del Xcel Center, el gigantesco escenario de convenciones, ferias y espectáculos deportivos de St. Paul, más de un centenar de oradores, incluido el actor y gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, y el senador demócrata ahora independiente Joseph Lieberman, de Connecticut. Pero, pocos contrastarán entre sí más que el presidente saliente George W. Bush; y la desconocida y juvenil gobernadora de Alaska, Sarah Palin, escogida el viernes por McCain para la vicepresidencia.
Con Palin, McCain ha querido no solamente ofrecer a los electores un "rostro fresco" del Partido Republicano, al que los demócratas critican como rezagado en la historia, sino satisfacer a la extrema derecha de su partido con sus posiciones conservadoras.
Con Palin retornó al debate electoral el tema del género, exacerbado por la presencia de Hillary Clinton en las primarias demócratas que, superando el prejuicio racial de la condición de negro de Obama, dieron a éste la victoria.
En un aviso publicitario de Obama difundido ayer sobre la llegada de Palin a la papeleta republicana, los demócratas hacen notar que "nada cambia" con ella porque McCain sigue siendo la continuación de las políticas impopulares de Bush. Pero el anuncio ilustra la reacción cautelosa de los demócratas a Palin, en momentos en que simpatizantes de Obama y Clinton se esfuerzan todavía por resolver sus disputas.