VENECIA (DPA) - El mexicano Guillermo Arriaga difícilmente olvidará el día de ayer, tras poner a prueba su talento como director ante la crítica y el público del Festival de Venecia con su primer largometraje: "The Burning Plain", un drama con Charlize Theron y Kim Basinger.
En juego estaban no sólo los nervios de un debutante, sino demostrar hasta dónde puede llegar el escritor tras su sonado "divorcio" de Alejandro González Iñárritu ("Babel"), por sus reivindicaciones de un mayor reconocimiento autoral a los guionistas. "The Burning Plain" inevitablemente se ve en términos comparativos con el cine de Iñárritu y Arriaga supera con éxito la prueba a juzgar por los aplausos recibidos.
El peso de la muerte, un pasado sin resolver, la redención y el amor son temas que bascularon en las películas que Arriaga escribió para Iñárritu y que definen "The Burning Plain".
El tema de su relación con "El Negro" (como se conoce cariñosamente al director de "Amores perros") surgió sólo en el último momento de la rueda de prensa y el director, que se puso nervioso, quiso evitar avivar la polémica con unas escuetas y educadas palabras: "Ante todo quiero dejar claro que Alejandro es un director maravilloso y estamos muy satisfechos de las tres películas que hemos hecho juntos".
Seguidamente pasó a destacar lo protegido que se había sentido por su equipo delante y detrás de la cámara, lo que ha convertido este rodaje en el "momento más bonito" de su vida laboral. Pero la verdadera protagonista de la rueda de prensa fue la espectacular actriz sudafricana Charlize Theron, que acudió con un hermoso vestido fucsia. Le acompañaban también el actor mexicano José María Yazpik, así como los estadounidenses Jennifer Lawrence y J.D. Pardo.
Theron da vida a una mujer con un pasado que intenta olvidar marcado por la muerte de su madre, encarnada por Kim Basinger. "Tengo obsesión por el peso de los muertos", señaló Arriaga. "Mi identidad se construye con las personas que quiero, por eso cuando alguien a quien quiero muere, una parte de mi se quiebra", explicó.
"Vivimos en una sociedad obsesionada con la representación de la muerte", añadió el realizador, para quien la lucha contra la vejez en forma de cirugías plásticas, por ejemplo, constituye sólo una forma de reprimir la muerte.
En el metraje, las vidas de las dos ganadoras de un Oscar se cruzarán con los personajes que interpretan el mexicano Yapzik y el portugués Joaquim de Almeida, cada uno ellos marcado por los cuatro elementos: agua, tierra, fuego y aire.
Recordando a la gran ausente en Venecia del equipo, la actriz Kim Basinger, Theron aseguró: "Es increíble. Tiene una fuerza ahora muy peculiar, es mejor que cuando tenía 30 años".
La actriz sudafricana recibió una propuesta de matrimonio de un periodista brasileño, quien comenzó preguntándole en qué lado de la cama dormía. Ella entró en el juego replicándole que dormía donde no estuviera él y cuando el reportero le pidió matrimonio, Theron replicó: "Eres muy simpático, pero mi novio te va a matar". Y tras unas risas añadió: "¿Cuánto dinero tienes?"
Theron ha asumido en esta película parte de la financión junto con la productora 2929 ("Buenas Noches, buena suerte"). "No hay que ser productor si se intenta ahorrar. Me interesa la parte de la producción porque también se puede ser creativo", apuntó la actriz.
Guillermo Arriaga, que acude a Venecia con la esperanza de levantar el León de Oro, ha demostrado que también sabe dirigir. Y si su película se ve sin poder apartar de la mente el cine de Iñárritu, también sobre el futuro del "Negro" pesa la sombra de Arriaga, pues tendrá que demostrar que sabe emocionar sin contar con sus guiones.
Si esperada era la película del mexicano, no lo era menos el nuevo trabajo del director Barbet Schroeder, que marchó a Japón para rodar "Inju, la bête dans l'ombre", la segunda película presentada ayer en concurso y la primera en la que se escuchan abucheos.
Basada en la novela "Inju", de Edogawa Rampo, Schroeder presentó una cinta que ha sorprendido a la crítica su factura, una malograda imitación de los clásicos, especialmente ya habiendo abordado el thriller con "Murder by Numbers".
"Inju" gira en torno a un exitoso escritor francés de novelas policíacas (Benoit Magimel), que viaja a Japón para presentar su nueva novela, y allí conoce a una geisha (Lika Minamoto), que le conduce hasta su ídolo, un misterioso escritor japonés.