Luis Esquivel es el secretario de Hacienda del municipio de San Antonio Oeste, uno de los que suscribió el convenio con el Ministerio de la Familia para la provisión de alimentos frescos. "Nos envían alrededor de 13.000 pesos por mes, y unos 10.000 se van en el pan para las escuelas. En algún momento cortamos el pan a los CEM y las directoras enviaron una nota para que lo sigamos mandando porque los chicos no querían las galletitas", relata el funcionario que integra el gabinete de Javier Iud.

La concejal de esa localidad, Marilyn Gemignani fue quien hizo el contacto con los directivos de los secundarios quienes le plantearon la necesidad de que se siguiera con el suministro de pan. La edil coincide en manifestar el rechazo de los alumnos a las galletitas que provee el Ministerio a través de Flavors. También el flamante coordinador del Ministerio de la Familia en San Antonio, Wálter Hermida, se encargó de hacer gestiones ante Mauricio Boland para que se provea de pan a los secundarios. "El pan nosotros no lo pagamos, si el municipio quiere destinar los fondos a eso es cosa de cada comuna", aclara Boland.