Ángel Di María vivió un torneo de ensueño en Pekín y lo cerró con el gol de la victoria de Argentina ante Nigeria (1-0), que le dio el segundo oro olímpico consecutivo a los albicelestes. Además, recibió la noticia de su convocatoria para la selección mayor que dirige Alfio Basile.
"Iba a patear fuerte, pero cuando el arquero (Ambruse Vanzekin) me achicó el espacio, no tenía dónde tirar. Y bueno... gracias a Dios la piqué (globo) y entró", contó Di María sobre su gol en el Nido de Pájaro.
Para el carrilero izquierdo del Benfica de Portugal el oro brilla doble, porque él fue la gran figura en la clasificación a Pekín durante el Sudamericano de Paraguay 2007, en el que Argentina selló su billete con la última bola de un choque decisivo contra Uruguay (1-0).
El ex Rosario Central fue el que rompió el cerrojo de la potente defensa nigeriana. "Fue el gol más importante de mi vida. La verdad es que esto es algo soñado y nunca me imaginé estar viviendo algo así y no lo voy a olvidar", contó Di María. Y elogió a Lionel Messi: "por suerte Lio me puso el pase perfecto, justo y pude definir con tranquilidad".
La pelota todavía no había
ingresado, pero el goleador salió festejando antes de tiempo: "me di cuenta que iba a entrar y de la emoción salí corriendo para un costado, pero en ese momento quería abrazarme con todos mis compañeros", concluyó.
La motivación desbordante del rosarino se notaba. Horas antes del duelo final, recibió un olímpico premio al enterarse de que ha sido designado para integrar la selección mayor de Alfio Basile que disputa las eliminatorias del Mundial Sudáfrica-2010.
"Es un sueño muy grande para mí jugar en la selección. Ojalá pueda seguir haciendo goles allí", dijo el mediocampista. La confirmación deberá hacerla frente a Paraguay, líder de las eliminatorias y ante Perú, el 6 y el 10 de setiembre, respectivamente.