NEUQUÉN (AN).- El cine francés sigue dando pelea en el mundo: produce varios éxitos, tiene buenísimos actores y enorme calidad, gana premios, y logra, pese a la presión del cine hollywoodense, atraer fieles seguidores en salas y videoclubs.
Por eso, desde hace nueve años se desarrolla en Neuquén -como en otras localidades- el Ciclo de Cine Francés organizado por la Embajada de Francia, la Alianza Francesa neuquina y TV5. En esta oportunidad, como es habitual, el ciclo presentará algunas de las mejores obras recientes de la filmografía francesa que se verán en la pantalla del Cine Español desde mañana y hasta el miércoles.
"Sostener un evento durante tantos años es una gran satisfacción", dijo la directora de la Alianza Francesa local, Nora Barbaresi. "Sobre todo porque el ciclo sirve para que esté presente la cultura francesa en el Valle y la región", agregó.
El ciclo -que contó con la colaboración del Concejo Deliberante- arranca mañana, a las 19.30, con la actuación de la Banda y la Orquesta Infanto Juvenil, dirigidas por Pablo Sobrino, y seguirá con la proyección del filme "Le rôle de sa vie" (!El papel de su vida", 2004), una comedia ro
mántica de François Favrat protagonizada por Agnés Jaoui, Karin Virad y Jonathan Zaccaï.
Este largometraje participó en varios eventos internacionales y ganó en Montreal el premio al "Mejor Guión" en el Festival de Cine del Mundo. ¿Por qué es el sueño de tanta gente volverse famosa? ¿Cómo será ser famoso? Estas son sólo algunas de las preguntas que atraviesan la historia entre Elisabeth Becker, una estrella de cine muy famosa, y a Claire Rocher, una muchacha gris que trabaja en una revista de modas y se convierte en la asistente personal de Elisabeth.
Otro título importante es el
"Vipère au poing" ("Víbora en el puño"), una película dirigida por Philippe De Broca en 2004, que se verá el martes, a las 20. A la manera de grito de rebelión, es una adaptación de una de las novelas sobre el tema de la infancia más conocidas de la literatura francesa. Protagonizada por Catherine Frot, Jacques Villeret y Jules Sitruk, es un relato fuertemente autobiográfico que, con tono tragicómico, da cuenta del combate violento y despiadado que libra un niño de diez años contra su madre en el seno de una familia burguesa venida a menos hacia 1920.
También el martes, a las 22, se verá otro filme interesante: "Ma vie en I'air" ("Mi vida estropeada", 2005) la comedia del director Rémi Bezançon. Ahí aparece Yann Kerbec como instructor de una compañía aérea, pero que tiene un problema: tiene miedo del avión, un miedo terrorífico que le viene desde el día que nació y le impidió seguir a la mujer de su vida al fin del mundo.
Para cerrar el ciclo, el miércoles se verán dos largometrajes. Para las 20 está prevista la proyección del policial dirigido por Xavier Beauvois en 2005, "Le Petit Lieutenant" ("El pequeño teniente") en el que un joven teniente es elegido para integrar un equipo de policía criminal. Y luego, a las 22, es el turno de la comedia "Je ne sui pas lá pour être aimé" ("Yo no estoy aquí para ser amado") dirigido por Stéphane Brizé en 2004. El film trata sobre Jean Claude Delsart, un oficial de justicia de 50 años con el corazón y la sonrisa fatigados que un día comienza un curso de tango y le cambia la vida.
En la antesala de los diez años del ciclo, las películas de ahora importan no sólo por la variedad de géneros, sino también por por su actualidad, algo que permite a los cinéfilos un acercamiento a los acontecimientos de la Francia contemporánea.