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Olvidemos todo esto de una vez | ||
La meta olímpica de los atletas estadounidenses era escuchar cada noche al menos una vez el "Star Spangled Banner", el himno nacional de Estados Unidos. Así lo había declarado Bubba Thornton, el entrenador del equipo masculino de atletismo de Estados Unidos, antes del inicio de los Juegos . Pero lo que más sonó en las pruebas de atletismo fue "Jamaica, Land We Love (la pista que amamos)", el gran hit en el estadio olímpico de la capital china. Estados Unidos, antigua potencia en la disciplina olímpica por excelencia, quedó relegado por el país caribeño. La imagen más clara del desastre del equipo estadounidense fueron las semifinales de los relevos 4 x 100 metros, que eran un bastión de los velocistas estadounidenses. Tanto el cuarteto de chicas como el de chicos dejó caer el testigo. Por primera vez en veinte años, los relevistas estadounidenses no están en la final. "Los Juegos no se están desarrollando para el equipo estadounidense tal como los atletas nos imaginábamos", dijo Lauryn Williams, atleta a la que se le cayó el testigo. Tras siete días de competencia, sólo cinco veces el equipo estadounidense estuvo en la parte superior del podio. El peor balance olímpico se remonta a treinta años atrás: en 1972 y 1976 ganaron seis oros. Pero no sólo los velocistas quedaron relegados: Ni un sólo estadounidense estuvo en las finales de salto en largo, salto en alto o triple salto. | ||
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