CIPOLLETTI (AC).- El delincuente estaba muy bien dateado. Ayer a la mañana, se presentó de traje en la vivienda de una mujer mayor y se hizo pasar por un empleado del banco Patagonia, diciéndole que iba "por los depósitos". Cuando la dueña de casa le abrió, el supuesto bancario le propinó un golpe de puño en el rostro y le exigió el dinero. Pudo escapar con unos 4.000 dólares, 3.000 euros y unos 3.000 pesos que la damnificada había retirado hacía escasos días de esa entidad.
La modalidad preocupó a la policía por el trabajo de inteligencia que evidentemente hubo previo a este hecho.
Según informaron las autoridades de la comisaría Cuarta, el robo ocurrió en Libertad al 100 de Cipolletti, una vivienda protegida por rejas y alarma, medidas de protección que de nada sirvieron con semejante ardid.
Cerca de las 10, un sujeto muy bien vestido, de traje, tocó el timbre de la casa y le dijo a la dueña de apellido Di Loretto, que iba "del banco Patagonia, por los depósitos". La mujer, de 63 años, no sospechó. Hacía aproximadamente una semana había retirado una suma importante de esa entidad con la finalidad de comprarse una prótesis. Aún tenía el dinero guardado en su casa.
Di Loretto abrió la puerta y apenas lo hizo, el malviviente ingresó y la golpeó en la cara. No le exhibió ningún arma, pero la contextura física mayor y la violencia con la que actuó, fue suficiente para que no se resistiera. "Dame el dinero, dame el dinero", le reclamó. La mujer, atemorizada, decidió entregarle sus ahorros: unos 4.000 dólares, 3.000 euros y una suma aún no determinada en pesos, que estiman rondaría los 3.000.
El caso conmocionó al barrio San Pablo, que desde hace un tiempo está siendo blanco de varios hechos delictivos.
El mapa del delito confeccionado el mes pasado dio cuenta de ello: los robos se trasladaron desde la zona norte a la zona céntrica y a este barrio puntualmente, uno de los históricos de la ciudad.
Más allá de esto, preocupó por la información que se estaría "filtrando" desde los bancos. El pasado miércoles a un hombre que había retirado dinero de la sucursal de Credicoop le sacaron unos 10.000 pesos (inicialmente se informó 5.000). Ese hecho fue el mismo día de la extracción. El caso de ayer, ocurrió unos días después del retiro bancario.
"Iba con datos muy precisos", dijo con inquietud uno de los investigadores. Es que el malviviente no sólo sabía que había dinero en el domicilio sino también de dónde lo había extraído la damnificada. El dato del banco no le hizo dudar a la mujer para abrir la puerta, aunque se encontró con una pesadilla.
La policía iba a realizar reconocimientos fotográficos para intentar identificar al delincuente que obviamente actuó a cara descubierta. Por otra parte estaba en busca del vehículo que habría utilizado para huir.