NEUQUÉN (AN).- Los trabajadores del hospital Eduardo Castro Rendón se dirigieron ayer al gobernador Jorge Sapag, al que en el contexto del escándalo de los "ñoquis" en el sistema de Salud, le solicitaron que "no corte el hilo por lo más fino" y que se investigue las responsabilidades de ministros, subsecretarios y directores, a quienes atribuyen la posibilidad de que haya quienes cobren sin trabajar.

El delegado de la Junta Interna de ATE, Baltazar Álvarez, el secretario general del sindicato, Ernesto Contreras, y los médicos Noemí Alemany y César Dell'Alli (Profesionales), difundieron una lista de 90 personas, a las que ya había accedido este diario, y adelantaron que hay 120 más "que estaban cobrando en Salud, y a finales de la semana pasada las pasaron a la órbita de la Jefatura de Gabinete".

Álvarez señaló que entre

quienes cobran en Salud se encuentra el ex ministro del área Fernando Gore.

"Figura cobrando en la zona metropolitana, como si trabajara en un centro de salud. No está en ninguno. Le pagan por capacitarse por dos años en Buenos Aires. Es diferente a lo de cualquier empleado: cuando nos capacitamos lo tenemos que pagar de nuestro bolsillo", afirmó el gremialista, quien le demandó a Sapag que "se investigue, y se deje de hacer el caldo gordo a los parásitos" en lugar "de resolver la falta de

médicos dentro de los hospitales".

Dijo que entre otros nombres figuran "el ex ministro de Hacienda Claudio Silvestrini y sus asesores". Y agregó que hay "jugadores de fútbol de clubes de Lifune (Liga de Fútbol de Neuquén), y autoridades de esta liga", que cobrarían y no tienen ninguna función en el sistema público.

El miércoles pasado Sapag dijo que se había sumariado a personas que no estaban en su lugar de trabajo. Y que habría controles en todo el Estado. Lo dijo al hablar por primera vez luego de la denuncia pública que hizo la encargada de Sueldos de la subsecretaría de Salud, Mabel Monsalve, en el contexto de la disputa interna entre el ministro Daniel Vincent y Claudio Ferrón.

El gobernador también dijo que más allá de más controles no propiciaría una "caza de brujas".

"Buscar responsables no es cazar brujas", dijo Dell'Alli ayer. "Si hay ñoquis significa que hay alguien que no cumple con sus funciones de controlar", agregó. "Hay políticas de vaciamiento del sistema, y pensamos que el gobernador en estos primeros ocho meses de gestión iba a corregirlas", señaló Alemany.

Contreras planteó que una vez realizados los sumarios, se debería seguir por las "responsabilidades jurídicas y penales de los cargos de conducción". En esto coincidieron todos, y también en que es necesaria la intervención de diputados para que el gobierno dé la información completa de la base de datos del personal y así permitir una depuración y dividir aguas "entre quienes trabajan y quienes se burlan de la ciudadanía por la falta de control".