Viernes 22 de Agosto de 2008 Edicion impresa pag. 2 y 3 > Nacionales
CONTEXTO: Endeudadas y con el 40% de los aviones fuera de servicio
Aerolíneas concentra el 80% del mercado de cabotaje. El servicio tiene fuertes quejas de usuarios y acumula una deuda de 890 millones de dólares.

Tras siete años en poder del grupo español Marsans y condicionadas por las continuas huelgas de los sindicatos, Aerolíneas Argentinas y Austral, quedaron sumergidas en una grave crisis, con una deuda de 890 millones de dólares y el 40% de su flota fuera de servicio.

Las que siguen son algunas claves para entender el marco de situación que rodea la reestatización:

" Proyecto. El Congreso tendrá la última palabra sobre el precio que el Estado deberá pagar a Marsans por las acciones de ambas compañías, que será calculado por el Tribunal de Tasaciones de acuerdo al valor de Aerolíneas y Austral en junio, antes de ingresar en cesación de pagos.

La iniciativa del oficialismo precisa además que 10% del paquete accionario quedará en manos de los trabajadores a través del Programa de Propiedad Participada, e impide una futura cesión de la mayoría accionaria a privados

" La oposición. votó contra del proyecto oficial por considerar que obligará al Estado a asumir la deuda de 890 millones de dólares, que consideran un fraude al fisco.

" Anuncio oficial. La presidenta Cristina Kirchner informó el 21 de julio sobre la recuperación del control de la compañía de bandera y su complementaria en vuelos de cabotaje, que controlan el 80% del mercado doméstico, al margen de las rutas internacionales que maneja Aerolíneas Argentinas (AA).

" Reestatizaciones. La de Aerolíneas se sumó a las emprendidas por el ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007) con empresas de agua potable, correos y ferrocarriles, entre otras, y es la primera que lleva adelante su esposa en el poder. AA y Austral fueron privatizadas en 1990 durante la presidencia de Carlos Menem (1989-99), que las cedió por adjudicación directa a la española Iberia, a pesar del aluvión de denuncias judiciales por corrupción, que intentaron frenar el traspaso.

Iberia se retiró del negocio en 2001, cuando la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) transfirió la posesión a Marsans, que pagó un precio simbólico de un dólar y recibió del erario público español 758 millones de dólares para cubrir pasivos de la empresa.

" Mala gestión. El gerenciamiento de Marsans viene tambaleándose y el Estado argentino tuvo que pagar el mes pasado los salarios de los 9.000 empleados de las dos aerolíneas, en medio de denuncias contra los españoles por supuesto vaciamiento de las empresas, que realizaron gremios aeronáuticos y legisladores de la oposición. (AFP)

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí