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González Robinson apeló la sentencia en su contra | ||
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El médico y empresario Miguel González Robinson, que hace tres semanas fue condenado a tres años de prisión por homicidio y lesiones culposas en un accidente de tránsito, apeló el fallo del juez Gregor Joss y recurrió en casación ante el Superior Tribunal de Justicia provincial. La sentencia condenatoria fue dictada el pasado 31 de julio y la presentación de la apelación parece ser extemporánea, pero habría beneficiado al recurrente que el 18 de agosto fue feriado, y que habrían declarado la suspensión de términos tres días en los que apenas nevó en la ciudad, aunque toda la actividad ciudadana continuó desarrollándose de manera normal, incluso en los tribunales. Como la condena aún no quedó firme, por la particularísima suspensión de términos y porque el imputado hizo uso de su derecho de apelar el fallo, el tribunal que lo juzgó no le retiró el registro de conductor, y el procesado continúa manejando un auto por las calles de la ciudad. El 31 de julio, en una sentencia de 24 carillas, el juez Gregor Joos rechazó las nulidades planteadas, valoró el reconocimiento de culpa del imputado, como autor de la colisión, y señaló que "se encontró con una motocicleta circulando a una velocidad razonable y ni siquiera teniendo 40 metros de distancia intentó sobrepasarla o frenar su vehículo. No existió ningún tipo de maniobra útil para evitar la colisión", sentenció. El magistrado realizó apreciaciones sobre la velocidad de los rodados y consideró excesiva la del que conducía González Robinson, o que su reacción ante la presencia de la moto fue "absoluta e increíblemente tardía". Por eso le reprochó la imprudencia por exceso de velocidad, negligencia por falta de dominio y reacción oportuna, e impericia, por ausencia de maniobra para evitar el choque, y le impuso 3 años de prisión y 7 inhabilitación. Sin embargo, no le retiró el registro en forma preventiva, porque la sentencia no está firme. Si el bien más preciado del individuo es su libertad, y pueden privarlo de ella aunque goce de la presunción de inocencia, ¿cómo permiten que un individuo continúe manejando si pesan sobre él las sospechas enumeradas por un juez? | ||
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