VARSOVIA (Télam/DPA).- Polonia, que durante tres siglos vivió atemorizada por dos vecinos más potentes y no pocas veces expansionistas, Rusia y Alemania, podrá contar desde ahora con un poderoso aliado estratégico: Estados Unidos.

La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, y su par polaco firmaron ayer en Varsovia un acuerdo para instalar una base de defensa antimisiles en Polonia, pese a la tajante oposición de Rusia al proyecto.

El acuerdo para establecer 10 misiles interceptores a unos 180 kilómetros de la frontera oeste rusa fue suscripto por Rice y el canciller Radek Sikorski, en momentos de gran tensión entre Moscú y Occidente por la reciente guerra entre Rusia y Georgia.

La semana pasada, en medio de recriminaciones hacia Occidente por sus críticas a la invasión rusa a Georgia, uno de los principales generales rusos advirtió entre líneas a Polonia de que podría ser blanco de un ataque de Rusia, incluso nuclear.

"Es un acuerdo que nos ayudará a responder a las amenazas del siglo 21", dijo Rice.

El primer ministro polaco, Donald Tusk, dijo que el acuerdo se firmó luego de duras pero amistosas negociaciones. "Logramos nuestras principales metas, lo que significa que nuestro país y Estados Unidos serán más seguros", dijo el premier. Muchos polacos consideran el acuerdo una forma de protección en momentos en que la invasión rusa de Georgia generó alarma en Europa del Este. Polonia es miembro de la Unión Europea (UE) y de la OTAN, y el acuerdo profundizará sus vínculos militares con Washington .

Rusia advirtió que su réplica a la instalación de misiles de Estados Unidos en Polonia "trascenderá la diplomacia".

Estados Unidos asegura que el sistema pretende proteger a Europa de un eventual ataque de Irán, pero Rusia dijo que el objetivo evidente de los misiles es debilitar a Rusia, en "esfuerzos estadounidenses por cambiar el equilibrio estratégico en su favor". "Los misiles interceptores de largo alcance que van a ser desplegados en Polonia no tienen, y no van a tener en el futuro previsible, ningún otro blanco que los misiles balísticos intercontinentales de Rusia", dijo la cancillería.