POMONA (AVM).- Un chico de 15 años que se descompuso justo antes de entrar a jugar al fútbol sufrió convulsiones y, derivado a un centro asistencial de Roca, quedó en estado de muerte cerebral. El hecho causó conmoción no sólo en Luis Beltrán sino en toda la comarca por cuanto se dio en el marco de la segunda fecha del torneo Clausura que organiza la Liga Avellaneda.

El episodio sucedió por la tarde del sábado en la cancha del Club Atlético Pomona donde se enfrentaban Escuela Deportiva Alumni -de Lamarque pero que hace de local en esta localidad- y Asociación Española, de Beltrán.

Como consecuencia de lo sucedido, la mesa directiva de la Liga Regional de Fútbol Avellaneda decidió suspender la actividad programada para ayer y un partido que debía completar la fecha a jugarse hoy por la segunda fecha del Clausura de primera división.

De acuerdo al relato de algunos presentes, Franco Maximiliano Gómez, el joven de 15 años jugador de Asociación Española de Luis Beltrán, estaba esperando junto a sus compañeros de quinta división que terminara el encuentro de sexta para ingresar a la cancha y jugar el siguiente. Sin que nadie pudiera preverlo, de pronto el niño cayó boca abajo. Cuando se acercaron algunos compañeritos, se dieron cuenta de que Franco estaba mal y pidieron auxilio.

La policía, que se encontraba en la cancha, lo cargó al patrullero para llevarlo hasta el puesto sanitario pero se encontraron con que allí no había nadie. Rápidamente ubicaron a la médica y al chofer de la ambulancia, cuestión que les habría significado una pérdida importante de tiempo. El periplo continuó hacia el hospital de Lamarque donde trataron de reanimarlo y seguir viaje a Choele Choel; ya el cuadro de situación se presentaba muy complicado. Desde el nosocomio choelense fue derivado a un centro asistencial de Roca donde ya habría llegado en estado de coma. Ayer a la mañana, la información indicaba que como consecuencia de una hemorragia masiva en el cerebro, el joven tuvo muerte cerebral y por lo tanto procedieron a desconectarlo de los aparatos que lo mantenían con vida.

Si la información de la tarde del sábado causó gran consternación en la región mucho más aconteció ayer con las tristes noticias que iban llegando desde Roca.