LAGO CASA DE PIEDRA (ACA).- Integrantes de la familia Ñanculeo, desde el martes pasado mantienen cortada la ruta provincial para impedir que circule por allí ningún rodado de la empresa "Petrolífera".

El piquete se mantenía reclamando riego en los caminos lindantes con sus campos ubicados en la zona rural cercana al Lago Casa de Piedra del lado rionegrino. Se quejan de que el paso continuo de los vehículos tapa con polvillo el poco pasto del que disponen los animales.

Por su parte, la empresa habría radicado una denuncia por cortar una ruta provincial, en alusión al camino que sale a la ruta que va a General Roca. Los lugareños sostienen que si bien siempre se ha dicho que esa es una ruta provincial, en las mensuras no figura tal camino, con lo cual no es otra cosa que un camino interno dentro de sus propiedades.

La medida de fuerza se mantiene desde el martes pero no se había difundido hasta el viernes, cuando los pobladores rurales manifestaron su enojo a este medio por la falta de consideración de la empresa Petrolífera que transita por ese camino con rodados de distinto porte de manera permanente.

"Entendemos que ellos tienen que hacer su trabajo y todo lo demás. Pero ellos saben que el camino de tierra se levanta polvillo sobre todo cuando se anda a cierta velocidad. Y ese polvillo es un manto que va tapando el pasto. Así nuestros animales recorren el campo en busca de comida y no pueden hacerlo porque hay todo un manto de tierra que tapa el paso. Nosotros venimos sufriendo el tema de la sequía desde hace meses. Ahora que ha llovido un poco en los últimos meses y que puede recuperarse el campo un poco, es difícil que eso suceda acá, porque la tierra no deja que el pasto crezca y el que crece queda tapado de polvo", explicó a este diario Martín Ñanculeo.

No es la primera vez que los puesteros hacen este tipo de reclamos. De hecho en la mayoría de los sectores en donde hay tránsito de empresas, estas ponen regadores que trabajan las 24 horas para que el camino se mantenga húmedo y no cause este perjuicio.

Estos campesinos, integrantes de la familia Ñanculeo, aseguran que han advertido a la empresa sobre este problema y que han hecho caso omiso a su requisitoria. En otros sectores cercanos a estos campos, otras empresas han llegado a un acuerdo con los propietarios de campos, y dejan en manos de los campesinos el regado de los caminos incorporándolos como proveedores de la empresa.