JUNÍN, Buenos Aires (Enviado especial, Claudio Rabinovitch).- El vicepresidente Julio Cobos aprovechó hoy la jornada a cargo del Poder Ejecutivo para mostrarse con ruralistas e industriales en el municipio bonaerense de Junín y envió un mensaje que reflejó intenciones de conciliar el desacuerdo entre el gobierno y el campo. "Vamos a facilitar todos los medios y acciones para lograr un reencuentro", afirmó el mendocino durante su recorrida a la Expo-Junín, una muestra industrial, comercial y ganadera que convoca a unos 100.000 visitantes en cada edición.
Cobos respondió ayer a quienes -como el mandatario rionegrino Miguel Saiz-desde la Concertación lo criticaron por no haber consultado con el sector su voto de desempate contra las retenciones móviles en el Senado: "Nada que ver. Se hizo una reunión previa donde todos los referentes fueron consultados y primó la postura de alcanzar un proyecto consensuado".
Dijo que su pronunciamiento fue abrir una instancia de diálogo que fue rechazada por las bancadas mayoritarias. "Volvería a hacer las cosas de la misma manera", recalcó.
En su recorrida por el predio de la expo rural fue aclamado por la gente que al grito de "viva", "vamos" o "no nos abandone". Hasta le pidieron y firmó autógrafos.
Luego, durante una hora el ex gobernador de Mendoza compartió un almuerzo con el intendente Mario Meoni donde se escucharon duras definiciones.
Cobos ratificó el nuevo armado político y elogió al renunciante secretario de Relaciones Institucionales de Cancillería Horacio "Pechi" Quiroga. "No se sintió cómodo con lo sucedido y dio un paso al costado, es un amigo y seguimos trabajando juntos".
No quiso referirse al nuevo rol del ex intendente de Neuquén, pero una mano derecha de Cobos lo posicionó junto a Daniel Katz y a Meoni como integrantes de la mesa chica y principales dirigentes del flamante espacio.
Como nunca antes, Cobos mandó una clara señal hacia el radicalismo. Dijo textualmente: "Lo de los radicales K lo puso la prensa, somos radicales que estamos trabajando en un proyecto común junto al intendente Meoni en esta nueva etapa, y aportando para reconstuir al radicalismo que es una fuerza importante".
Consultado sobre la división del bloque de la Concertación en Diputados, Cobos tampoco fue evasivo: "Si no hay un pensamiento unificado más vale dividirse, los legisladores que están con nosotros quieren aportar ideas sin adherir con ojos cerrados, ese fue el motivo".
La tensión en la relación de Cobos (que ayer insistió en sus diferencias sobre el INDEC y Aerolíneas) con Cristina Fernández parece seguir creciendo. "¿Es irrecuperable?", lo consultó un periodista. "Ya no depende de mí", devolvió lacónico.
La presencia de Cobos por esta ciudad agroganadera estuvo lejos de ser protocolar, pareció un acto opositor. Hasta el día que despuntó nublado se tornó soleado con el arribo de Cobos. En un pizarrón con la forma de una vaca, unas mujeres anotaron bien grande con tiza: "Mi voto no es positivo".