ZAPALA (AZ).-Un nutrido de grupo de subsidiados y contratados mantenían ayer tomado el Palacio Municipal y parte del edificio comunal en reclamo de un pase masivo a planta permanente.
Los manifestantes, que instalaron carpas y amenazan con quedarse por tiempo indeterminado, rechazaron una propuesta del intendente, Edgardo Sapag, de abrir un compás de espera hasta la semana próxima.
Los principales referentes de la protesta se entrevistaron con el ministro de Seguridad, César Pérez, quien se comprometió a generar una mesa de diálogo con el gobierno provincial.
"Estamos pidiendo trabajo genuino, tenemos gente con más de diez años de antigüedad en el municipio que realiza las mismas tareas que los empleados de planta pero cobran un subsidio de 150 pesos", señaló el secretario local de ATE, Juan Pelayes.
El dirigente gremial cuestionó la actitud de las autoridades municipales quienes solicitaron una tregua hasta el miércoles. "No tenemos gobierno, le fuimos a presentar nuestro reclamo al intendente Edgardo Sapag y nos dijo que el problema le pasó por en
cima", advirtió Pelayes. La decisión de los manifestantes era mantenerse en el Palacio Municipal todo el tiempo que sea necesario hasta que se conforme una mesa de negociación con la presencia del Ejecutivo provincial y los gremios.
"Mientras la provincia hace un esfuerzo por blanquear a todos los trabajadores vemos con preocupación cómo el municipio de Zapala sigue mirando para otro lado y desconociendo las necesidades de la gente", enfatizó.
El intendente Sapag reconoció la importancia de generar marcos de acuerdo pero destacó que el planteo de los manifestantes "no puede resolverse de manera inmediata". "Tenemos que analizar los pasos legales que establece la Constitución y nuestra Carta Orgánica antes de tomar cualquier determinación", sostuvo el jefe comunal, quien adelantó que en caso de ser necesario solicitará una audiencia con el gobernador Sapag. El mandatario local se quejó porque la medida de fuerza impidió que ayer funcionara el área de Recaudaciones. Desde el Deliberante, en tanto, se alzaron voces críticas hacia el rol del intendente en esta coyuntura.
"Esto lo veníamos advirtiendo desde hace tiempo, no hay gestión municipal y la posibilidad de un estallido social como el que estamos viviendo era más que clara pero desde el Ejecutivo no se realizó una sola acción para evitar el conflicto", dijo Ricardo Pérez, de Une.