MADRID.- El presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer un paquete de medidas para reactivar la economía y acallar las acusaciones de inmovilismo de la oposición de derecha, tras una inusual reunión de gabinete en pleno verano.

Rodríguez Zapatero tomó las riendas para hacer frente al deterioro de la situación económica, mientras los últimos datos oficiales sobre el crecimiento apuntan a un virtual estancamiento en el segundo trimestre del año.

El gobierno lanzó una vasta ofensiva para demostrar que se preocupa por un contexto cada vez más inquietante, como demostraron el jueves las cifras que ilustran un retroceso del crecimiento en el segundo trimestre, de 0,1% respecto al primero, contra 0,3% tres meses antes, la cifra más baja desde 1993.

Estos datos negativos se conocieron 24 horas después de que se hicieran públicas las cifras de una inflación récord anual de 5,3% en julio.

El gobierno anunció ayer, tras un consejo de ministros extraordinario, un paquete de 24 reformas para modernizar la economía, varias de las cuales habían sido anticipadas las últimas semanas.

La iniciativa gubernamental apunta claramente a poner de manifiesto el empeño de Rodríguez Zapatero, quien durante un tiempo negó la existencia de una "crisis" y ve cómo cae su popularidad en los sondeos desde su reelección en marzo pasado.

El mandatario español interrumpió sus vacaciones el miércoles para volver a Madrid y presidir la reunión de la comisión de asuntos económicos del gobierno, cuya presidencia solía ejercer el ministro de Economía, Pedro Solbes. (AFP)