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El pedido de una madre | ||
"Pablo retrocedía y Flores lo perseguía para llevárselo preso pero como no pudo sucedió lo que sucedió. Después del primer impacto me di vuelta y le dije: no mates a mi hijo, matame a mí. Así recuerda Gladys Huinca el homicidio de su hijo. Además aclaró que cuando su hijo llegó a su casa le contó que "había cacheteado a Silvina y que iba a venir a buscarlo la Policía". La esposa de la víctima y madre de dos pequeños que al momento de los hechos tenían 3 y 5 años, había declarado minutos antes que cuando llegaron Flores y Martínez a intervenir, Huenteleo peleó con el sargento y hasta habría caído al canal. Luego los efectivos la trasladaron al Hospital y tras pasar por la comisaría fueron a la casa de Huenteleo. La mamá de Pablo negó que su marido en algún momento hubiera tenido un arma blanca y lo mismo hizo Carlos Huenteleo cuando le tocó declarar. Javier Martínez, el cabo que acompañó a Flores hasta el domicilio de la familia de la víctima, estuvo muy cerca de ser procesado por falso testimonio, pero la decisión, analizada a pedido de la fiscal Zaratiegui, se postergó hasta el momento en que se lea la sentencia. Martínez dijo que antes de que golpeara las manos, Pablo salió de su casa y empezó a golpearlo, luego salieron su mamá y su papá. Pero en ese momento perdió la conciencia producto de los golpes. "Desde que Flores se bajó del móvil no me acuerdo más", afirmó. Justificó los problemas de memoria en que tiene hundimiento y fractura de cráneo producto de un accidente que le provoca síntomas de epilepsia y posibles desmayos u olvidos. | ||
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