Paul Stark, el subsecretario de Investigaciones del ministerio de Seguridad bonaerense, insistió hoy en que el asesinato de tres empresarios, cuyos cadáveres fueron encontrados ayer en General Rodríguez, "no es un tema de inseguridad" sino que es "un crimen mafioso" que habría sido detalladamente planeado.

Stark afirmó que "fue un crimen muy grave, en el que tres personas fueron privadas de su libertad y fueron asesinados" y que "la gente que los secuestró tenía una logística y los mataron con saña". El funcionario destacó que una de las víctimas tenía "cinco tiros en la cabeza, uno en la espalda y dos en el pecho", y en total los tres jóvenes tenían "dieciseis balazos", por lo que ratificó que "no fue un tema de inseguridad".

Stark, en diálogo con las radios Continental y América, se refirió así al asesinato de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, quienes habían desaparecido el jueves de la semana pasada hasta que ayer fueron encontrados sus cuerpos en un zanjón, acribillados a balazos.

El funcionario señaló que si bien los cadáveres no presentaban ataduras, sí tenían señales de "haber tenido precintos en los cuerpos". Stark no quiso revelar datos de la investigación, ni si los crímenes tendrían relación con el negocio de medicamentos falsos o de drogas.

Confirmó que la policía científica estima que habrían sido asesinados en el lugar donde fueron encontrados, y "al menos cuarenta horas antes" del hallazgo, que se produjo ayer a las 16.30. "Los tuvieron escondidos tres días para matarlos a sangre fría, y eso necesita mínimamente de una organización", señaló Stark, quien estimó que los asesinos "sin ninguna duda fueron a matarlos directamente, sabían lo que hacían".

FUENTE: DyN