CIPOLLETTI (AC).- Los cuatro sospechosos detenidos el viernes por orden de la jueza María del Carmen García García en el marco de la investigación por la desaparición y muerte de la jovencita Otoño Uriarte, de Fernández Oro, se negaron ayer a prestar las declaraciones indagatorias pero no sin antes rechazar de manera categórica los hechos que se les imputan y que están motivando las capturas, cuyos pormenores no trascendieron, aunque se supo que están directamente relacionados con el caso, en un presunto contexto de operación en grupo para perpetrar el ilícito.
Los sospechosos Ricardo Néstor "Piloti" Cau (28) y José "Pitoco" Jhaffri (24) -son hermanastros- como asimismo Maximiliano Lagos (20) y Ángel "El Gato" Antilaf (30), quienes fueron llegando al juzgado a las 8 de la mañana. El trámite se prolongó hasta casi las 17.
Contaron con el patrocinio del defensor oficial Gustavo Silva quien, en función de lo que estaba en su conocimiento porque no tuvo acceso aún a todos los cuerpos del expediente, y de los hechos que potenciaron las detenciones del viernes, recomendó la abstención de la indagatoria y además pidió la excarcelación de los cuatro.
Muestras de sangre
Se tomaron muestras de sangre de los sospechosos para hacer comparaciones con perfiles genéticos de al menos dos personas de sexo masculino ubicados en los restos óseos de la jovencita, que al momento de su desaparición tenía 16 años.
El fiscal José Rodríguez Chazarretta abandonó el edificio pasadas las 16.30 sin dejar ninguna precisión, inhibido por el secreto del sumario, aunque para las órdenes de captura habrían tenido que ver también sus diligencias con viajes a centros especializados de Buenos Aires con aportes de muestras concatenadas con la causa.
Cau, Jhaffri, Antilaf y Lagos -este último incluso como testigo espontáneo- desde la desaparición de la estudiante (la noche del 23 de octubre de 2006 en los primeros tramos de la calle rural Kennedy) pasando por el hallazgo, meses después, de sus restos mortales entrampados en una exclusa de la usina del paraje El Treinta, transitaron varias veces por el juzgado de García García, bajo distintos grados de supuestas sospechas, no de similar rango ni responsabilidades.
La jueza levantó ayer mismo las incomunicaciones aunque los cuatro siguen presos en diversas unidades del Alto Valle. García García tiene a partir de hoy, diez días hábiles para dictar procesamientos o libertades.
Luego de recibir en conjunto a los familiares que habían aguardado casi ocho horas en las afueras del juzgado, el defensor Silva confirmó la negativa de los cuatro sospechosos de los hechos imputados y la del trámite de las indagatorias, dijo que había reclamado las excarcelaciones y reafirmó el tema de las pruebas por perfiles genéticos que se estaban por realizar.
